Empiezo este artículo en el Aeropuerto Internacional Francisco Secada Vignetta, de Iquitos. Intento conectarme a la red inalámbrica pública de la sala de embarque, tarea difícil, dado que es limitada o nula. En el Terminal, en general, no es posible acceder, debido o que te solicitan contraseña o la red es tan débil que no sirve ni siquiera para perder tiempo. En la Zona Vip, una señal, débil, permite avizorar cierta esperanza. El único inconveniente es que la señal sigue siendo baja, no te permite ver un video de Youtube, te cuelga cualquier versión de Tweetdeck, te demora en cargar páginas (adicionalmente, hay que pagar 20 soles por hacer uso del espacio).
Durante los cinco días que estuve en Iquitos, me fue imposible conectarme de modo decente al Internet. Acceder al Twitter, que en otros lados te puede demorar menos de 5 segundos, podría tardar hasta 5 minutos (o no conectar nunca). El Facebook siempre se quedaba a medio actualizar. Ni hablar de usar el correo de Gmail, que se debe usar en modo HTML básico. Imposible ver un video completo de Youtube. Hacer una transferencia bancaria es lo mismo que no hacer nada. Adjuntar un archivo a tu correspondencia electrónica puede ser un ejercicio de paciencia.
En un conversatorio que tuvimos en la Universidad Científica del Perú (auspiciada por el Círculo de Comunicaciones), el especialista en TIC Alan Lozano, nos ilustró las dramáticas condiciones en las que se navega virtualmente. Como invitado, había preparado una exposición en un programa de diapositivas llamado Prez, el cual se activa via web. Fue imposible mostrarlo.
Cualquier expositor precavido sabe que no se puede fiar del Internet iquiteño, así que trabaja a partir de capturas de pantalla, que den la apariencia de estar cargando una página, cuando, por esas cosas del destino que cada vez son más comunes en nuestra realidad, al servicio se le ocurra ponerse rebelde, pesada, intolerable. En el mismo conversatorio, demostré que, desde una conexión móvil vía USB (de Claro, en este caso, porque Movistar es inútil), el servicio, de 1 Mega, supuestamente, corría ni más ni menos que a la velocidad de 0.09 kbps.
Lo que yo consideraba, en todo caso, como un agudo déficit loretano, en realidad es una triste muestra de lo que sucede en la Amazonía, toda. Esta semana, en Puerto Maldonado, pude comprobar una de los más caóticas, insufribles e ineptos servicios de conexión. Los mismos vicios que en Iquitos, solo que peores.
Ningún servicio es eficiente, en términos macros, en Madre de Dios, pero el Internet sí que es de espanto. Para graficar el nivel, al hacer palpable el problema en Twitter, recibí la réplica de la congresista Rosario Sasieta, quien comentó que una vez se demoró hasta 45 minutos para poder ingresar al servicio de Check In de una aerolínea e imprimir su ticket.
La carencia es tan dolorosa que, por ejemplo, las oficinas del Gobierno Regional (GOREMAD) el servicio es mediocre. No hay un sistema de red. El único lugar donde el Internet avanza, lento y a trompicones, es en el mejor hotel de Puerto Maldonado. En las cabinas que rodean a la Plaza de Armas, el servicio es igual de malo que en su sede política.
El mismo diagnóstico, con sus variables, en todo caso, se muestran en las demás regiones amazónicas. En Pucallpa, es lento, pero puede usarse (aunque algunos usos cotidianos tienen problemas en su ejecución). En San Martín las cosas son parecidas, con variantes. Si bien en Tarapoto las cosas no son tan desesperanzadoras, en zonas cercanas como Lamas o Moyabamba existen verdaderas fallas de sistema que promueven la inacción. En Amazonas, la cosa tiene la misma invariable ineficacia.
¿A qué se debe este problema? Pues, a muchos factores, entre los cuales, obviamente también figuran los clásicos, de orden geográfico. Pero, mucho más, son parte de la constante ineptitud que muestran el Estado y los gobiernos regionales, amparados además en la inacción de los operadores privados, que prefieren tener todo tranquilo y seguro a ser afrontados en su capacidad para generar espacios, tarifas y soluciones al tema.
Para graficarlo de un modo más claro, se pretende (aún ahora, cuando se ha demostrado las deficiencias y vacíos de rentabilidad) construir ferrocarriles o vías de comunicación terrestres excesivamente onerosas y sin posibilidades de éxitos antes que invertir adecuadamente en un sistema de conexión válida y útil.
Una conexión que haga posible que el poblador de Caballococha o del Datem del Marañón pueda hacer un trámite desde su propia localidad sin tener que pasar por el centralismo iquiteño necesita, evidentemente, de una inversión. Es más claro que nada de esto va a cambiar de la noche a la mañana, pero puedo asegurar que el cambio será más rápido y menos oneroso que, por ejemplo, agudizar la concepción mesiánica de que las grandes obras son solo pistas y concreto.
Las carreteras virtuales de la comunicación y la información no solo fomentan el intercambio sino mejoran la productividad y brindan una mejora espiritual en el ánimo de la gente. Con estos baches graves en la conexión amazónica, lo único que se logra es el atraso, la lentitud, el subdesarrollo.
Termino este artículo en el Aeropuerto de Puerto Maldonado, mientras me entero (no por Internet) que el Congreso ha aprobado en su primera instancia el Proyecto de Ley que promueve la Masificacion de los servicios de telecomunicaciones de banda ancha, así como la garantía del derecho fundamental de todo ciudadano al acceso a Internet, así como la autonomia de FITEL. Todo esto, mientras el Terminal aéreo carece de Internet y los servicios de supervisión de seguridad y base de datos se hacen de modo manual, debido a la inconexión.
Ahí el principal problema a luchar, más allá de las leyes escritas y los buenos deseos en materia de conexión, banda ancha y telecomunicaciones en la Amazonía.
Hola!
el desprecio de las autoridades por el progreso del pueblo realmente es patético y deberia ser considerado un caso de traición a la patria y procesarlos y condenarlos de que sirve el tan alardeado crecimiento económico si eso no se traduce en mejora de la calidad de vida de los peruanos? Por favor, si nosotros mismos no nos valorizamos que podemos esperar??
agregando a este comentario interesante claro lento iquitos (telmex), abusa con el precio del producto de internet, solo es para empresas el servicio y la poblacion?, encima tienes que demostar con documentaciion que tienes una empresa a precio exagerada de 450 soles mensuales un servicio de 520 kbs, donde estan las autoridades?, donde esta telefonica que no invierte en banda ancha (espeedy de unmega a 120 soles) pasado el tiempo la internet sera un servicio importante en el mundo y los loretano seran los perjudicados. espero que comenten mas haber si alguna autoridad le pide explicacion a telefonica que no hace nada por resolver este problema por eso ya pienso mudarme a otra provincia donde exista banda ancha.
Como siempre muy acertados e inteligentes comentarios, en especial aprecio mucho tú forma clara y escaza de errores de escritura. Sin embargo discreto sobre tus apreciaciones de fondo. Es cierto que las carreteras y los ferrocarriles no tienen sustento económico de ser (tal vez para trasladar la malhadada Soja transgénica de Brasil), ya que se necesitarían grandes volúmenes de productos que justifiquen tal inversión. Loreto no produce nada masivamente exportable (la madera por los temas ambientales ya no es una opción) Tal vez la industria del pescado (pero aún es incipiente). Las estadísticas del INEI del 2009 (que aun no se han actualizado), muestran que somos los primeros productores nacionales de Yuca y Plátano (que no son productos competitivos ni siquiera en los mercados nacionales. Entre Piura y Tumbes, son dejan atrás). Nuestra industria debe basarse en la Biodiversidad, productos agromedicinales, turismo, servicios medioambientales, entre otros que no sean de impacto en el medio ambiente. Pasando al tema del Ancho de Banda quiero discrepar en tus apreciaciones ya que los fundamentos más sólidos y sustentados para el requerir de ancho de banda de Internet no pasan por gente que como tú (que tiene su Laptop a la mano). Pasa por contar en la regiones amazónicas con aplicaciones informáticas que realmente dinamicen la economía y a la sociedad, no solo se debe pensar en poder ”tuitear” rápido, sino en pensar en productos como la producción de software Web, Aplicaciones de Tele Educación de carácter masivo con tecnología Web, Para Investigación Científica, En aplicaciones de Telemedicina y de promoción de lo que caracteriza nuestra economía, etc… No solo necesitamos tener ancho de banda para “sentirnos conectados”, “hacer nuestras pequeñas transacciones comerciales” o “para que los que puedan viajar regularmente en avión puedan imprimir su ticket”. Las preguntas son: Solo para eso necesitamos ancho de banda, dónde están las propuestas de los profesionales informáticos?
Saludos
Fernando Salazar
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