Proyecto SERVIR en hora clave
Algunos creen que una ley debe SERVIR a sus intereses
Arnold Portugal es un trabajador que tienen como oficio ser administrativo de una universidad nacional y como vocación profunda tomar locales cuando le viene la gana. Es un agitador profesional y cada vez que las bonificaciones, aumentos o canastas de navidad no le son otorgados con niveles superiores al año anterior, no se queja así nomás. Solivianta a sus compañeros que le siguen en la jugada y toman locales de la universidad donde trabajan. No les importa los 25 mil alumnos que estudian en esta casa de estudios, menos – era de suponerse – los 1400 docentes universitarios que tratan de enseñar. De esa manera suceden en cientos de locales estatales.
Y ahora están enfrascados en traerse abajo este proyecto SERVIR – junto con gran cantidad de trabajadores administrativos de sus pares de universidades públicas y de municipios, gobiernos regionales y otras dependencias de salud. Dicen en medios, calles y plazas que los “derechos adquiridos” no son infinitamente suyos. En desmedro de los derechos de los demás a ser atendidos decentemente, su mediocridad, ineficacia y compadrazgo para haber llegado a estos cargos (en un gran porcentaje), están por encima de todos. A eso, en términos prácticos les llaman su derecho inalienable que lo repite por todo lado para oponerse a este proyecto de Servicio Civil.
Lo cierto que la situación del empleado público en el Perú es un caos y un desorden total que no soporta más (1 millón 400 mil aproximadamente). Actualmente hay tres regímenes que norman a los trabajadores del sector público (independientemente de ciertos sectores como educación, FF.AA. y Salud que tienen leyes específicas). Está el famoso D.L. 276 en donde se concentran el 40%, la 278 o de régimen privado que concentra el 18% y la denominada Contratación Administrativa de Servicios (CAS) o antes conocido como los Servicio No personales (SNP) que concentra el 42% de empleados.
Para ejecutar esta legislación, existen más de 500 normas de distinto rango sobre el empleo público, más de 102 escalas remunerativas y una planilla pública con 400 diferentes conceptos de pago según el análisis del sector público que realizo el Consejo de Ministros para conocer el piso que caminaba al intentar formular el proyecto en enero de este año. Mediante este desmadre estatal, hay servidores con régimen privado (Ministerios, Sunat, Banco de la Nación…) y CAS que ganan más que los de la carrera pública o 276 a pesar que muchos de ellos tengan más años en el sector.
Un punto siempre reclamado por ellos bajo la premisa por ejemplo de ¿Porqué una secretaria o chofer de la Sunat gana más de 4 mil soles, mientras que un administrador o contador de un municipio con cinco años de universidad no supere los 1500? Precisamente porque dirigentes como Portugal se oponen al proyecto que intenta remediar esta desigualdad y utiliza pretextos como conculcación de derechos o el término de la ya famosa “estabilidad laboral”.
Actualmente los ascensos en el sector público, o son por antigüedad o por los cartones de cursillos que pueda haber realizado el servidor, no lo es por mérito. Por eso los trabajadores antiguos son los más preocupados con el proyecto, pues la norma establece que un ingresante al sector, en caso de aprobarse esta norma y de acuerdo a fuentes oficiales, tendrá una base salarial que no sería menor a los 1500 soles y el art. 19 del proyecto les garantiza el derecho a sindicarse. Otro “san Benito” falso que andan pregonando los dirigentes.
Otra crítica que se le hace es la evaluación de desempeño que será anual y bajo el cumplimiento de metas específicas lo que agrega un factor de mérito, algo que no les ha gustado y que aluden que será una especie de exámenes de tiempos fujimoristas para sacarlos del trabajo. Lo que pasa es que cuando una reforma no se realiza de manera transversal para sus efectos y de manera horizontal para su socialización, salen los mismos de siempre a atacarla porque, en sí, el proyecto ha nacido débil.
Por eso la gran mayoría de trabajadores que aún no conocen el proyecto salen a las calles como ayer gritando arengas ajenas a su realidad. Eso es casi seguro. (http://blog.pucp.edu.pe/media/4854/20130513-serviciocivil-proyectoley-2013-01.pdf). Se dejan llevar por los manipuladores de siempre que no les interesa desacreditarse más ante la sociedad cerrando universidades, municipios, instituciones educativas, con el pretexto de estar luchando por sus beneficios, mientras pisotean los derechos de una gran mayoría que reconocen en ellos a una burocracia inepta, mediocre y sin reales aspiraciones para el sector que representan.
Lea www.federicoabril.blogspot.com
Con algunos errores la nota en lo que respecta a la normativa legal, pero es una posición contraria a los que se oponen al proyecto de Ley SERVIR, la cual se tiene que aprobar para beneficio de todos…
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