Padre no aceptó su homosexualidad
GAY SE AHORCA POR MARGINACIÓN
Las diligencias del levantamiento estuvieron a cargo de la comisaría del sector, que comunicó del caso al fiscal de turno. Por la distancia, el cuerpo no llegó a Iquitos, se firmó un acta de entrega del cadáver a los familiares.
Sorprendidos se encuentran los vivientes del caserío Cahuide, río Nanay, distrito de San Juan Bautista, debido al suicidio de un joven gay que fue encontrado sin vida en un inmueble abandonado, donde pasaba sus días de soledad, pues fue marginado y echado de su casa por su padre, quien no aceptaba tener un hijo homosexual.
El cuerpo sin vida de José Antonio Pacaya Saboya de 20 años de edad, fue encontrado la noche del sábado, cuando un grupo de niños jugaba a las escondidas. Uno de ellos se fue a meter en la casa y en la oscuridad se golpeó con algo, el pequeño tocó el bulto y sintió que era algo extraño que lo obligó a salir gritando a pedir ayuda. Sus amigos, también asustados, fueron a sus casas a comunicar a sus padres de lo sucedido.
Cuando los adultos ingresaron se percataron del cadáver de Pacaya que estaba colgado del cuello con una soga atada en la viga del techo. Hasta ese momento no sabían quien era, todo el caserío se pasó la voz y la familia del suicida se acercó para reconocer el cuerpo.
El hermano del fallecido, Perry Pacaya, contó al agente municipal de Cahuide, que su hermano llevaba desaparecido tres días, después de haber tenido una discusión con su padre, quien lo echó de su casa al enterarse que José Antonio era gay.
“Mi papá no quería saber nada de mi hermano José, se enteró de sus andadas, por eso lo echó de la casa, nadie de mi familia pudo evitar que mi padre lo trate de esa manera, nos dolió mucho la situación que mi hermano pasaba, pero teníamos que aceptar la decisión de mi padre. Desde ese día no vimos a José, creí que estaba en Iquitos”, contó el hermano del suicida.
