Emergencia en el Pastaza
La constancia de las organizaciones indígenas ha logrado que se declare la emergencia ambiental en el área del río Pastaza, en la Amazonía norte de Perú. Un gran logro. Ha sido gota a gota de persuasión de estas organizaciones a lo largo de un buen tiempo. Es bien sabido que estas luchas ambientales no son caminos fáciles. De alguna manera también saludar a los parlamentario/rias que se animaron a ir a la zona del desastre ambiental, in loco presenciaron la situación que menoscaba el derecho a un medioambiente saludable y a la dignidad humana. El acceso para el goce de estos derechos se ha visto muy limitado desde la presencia de las explotaciones petroleras que han dejado un severo pasivo en el entorno natural. Como recordarán la Amazonía tiene protección constitucional y la legislación que la regula debe internalizar el concepto de desarrollo sostenible – principio amplio y sinuoso al cual el legislador debe darle contenido. Lo que hay que remarcar es la tenacidad de estas organizaciones la que han logrado poner en el mapa de la noticia esta zona de grave contaminación ambiental. Han logrado abrir los ojos a muchas personas y ojalá se sensibilicen. De acuerdo con el material visual que se publicó en un diario de ámbito nacional, líderes indígenas mostraban las zonas dañadas a una parlamentaria – espero que ella lleve las cosas hasta las últimas consecuencias, era realmente impresionante. Un área aparentemente reparada por la compañía petrolera cuando hundían las manos en la tierra se topaban con restos de residuos de la explotación petrolera ¿? ¿Esto era la reparación alegada? Es más la llevaron a una plácida cocha que aparentemente en la superficie se veía bien, pero apenas se sumergía encontraban restos de severa contaminación petrolera ¿Esa reparación es un engaño? Con estas pruebas irrefutables se ha logrado la declaración de emergencia ambiental en la zona del Pastaza. Ha sido un gran paso y no hay que bajar la guardia.
