*Padre Miguel Fuertes criticó que veredas no sean atractivas.

El padre Miguel Fuertes Prieto expresó su molestia con la obra de la Alameda Monumental. Cada vez que se registran lluvias, la caída del agua de la vereda no va a la calle, sino que desemboca en las paredes de la parroquia y termina empozándose.

“El agua pasa por las paredes. La Iglesia Matriz de Iquitos está construida de puro ladrillo, no tiene fierros ni otro soporte, y con la humedad se va a debilitar”, comentó el padre.

“Cuando construían la vereda de la calle Arica y de la iglesia, vimos que los desagües de la Iglesia Matriz estaban rotos y no los cambiaban. Entonces nos hicieron comprar los tubos y no sé si eso es regular o les correspondía a ellos”, expresó.

El sacerdote también se refirió al diseño de las veredas, que, para él, no tienen ningún atractivo artístico para pasear por ellas, porque tienen un aspecto “simplón y feo”.

“Esto es una patada al turismo, es una patada a los moradores de la alameda y a la ciudad entera, en cuanto a las veredas que no son nada atractivas estéticamente hablando”, refirió.