Desde artistas de “Game of Thrones” hasta actores como Morgan Freeman son las celebridades que tienen como objetivo recolectar un fondo de $5 millones de dólares en los próximos 60 días para que los guardianes de los bosques estén protegidos de la pandemia en los nueve países que conforman la Amazonía, entre ellos el Perú.
¿Quién ayuda a los defensores de los bosques? ¿Quién asegura que el líder indígena que vive en la Amazonía recibirá atención médica cuando el Perú está colapsado? Esta pregunta, que no parece haber sido prioridad para el gobierno durante la pandemia del COVID-19, sí se la hicieron “Dios” o hasta un personaje de “Game of Thrones”, hablamos de Morgan Freeman y Oona Chaplin, respectivamente.
Lo que sucede es que los artistas de Hollywood, a diferencia del gobierno peruano, se dieron cuenta de que la vida de los defensores de los bosques tropicales amazónicos (pueblos indígenas) peligran ante la evolución de la pandemia del COVID-19, según lo dan a conocer las últimas denuncias de los hermanos indígenas afectados.
Hasta el momento, según la Red Eclesial de la Panamazonía (REPAM) registra más de 100 mil casos conocidos de COVID-19 y más de 5 mil muertes confirmadas en toda la región amazónica de Latinoamérica. Solo en la selva peruana la cifra estimada asciende a más de 10 mil contagios y 400 muertes, según las direcciones regionales de salud del Perú. De modo que a medida que el coronavirus continúa propagándose, los pueblos originarios están cada vez más en riesgo y podrían enfrentarse a un potencial etnocidio.
Los pueblos indígenas Shipibos de Ucayali y los de Loreto como los Mátsés, Ticunas, Kichwa, Bora, Huitoto Muruy, Urarinas, Achuar entre otros, vienen reportando de manera constante infectados y muertes. Sin embargo, debido a la falta de recursos sanitarios en toda la región, las autoridades de salud no notifican y actualizan estos casos reportados desde las distintas comunidades, por tal razón, quedan vulnerables y desatendidos. A esta realidad se le suma el riesgo del contagio del virus, las actividades de deforestación y extracción ilegal en territorio indígena.
Por ello, artistas como Barbra Streisand (ganadora de dos premios Óscar); Jane Fonda (dos Óscar), el famoso guitarrista Carlos Santana y otros artistas decidieron lanzar un evento benéfico de talla mundial en el marco de la campaña “Artistas Unidos por la Amazonía: Protegiendo a los Protectores de los Bosques”. Una coalición de organismos no gubernamentales (distintas ONG), artistas y científicos como la renombrada primatóloga británica, Jane Goodall, que participaron del acto benéfico que se transmitió de manera virtual en FB y en la web Artist for Amazonia, sin embargo, el apoyo de las celebridades de la ciencia y el cine de Hollywood no se detiene y siguen buscando fondos de emergencia para la Cuenca Amazónica.
Fondo mundial por la Amazonía para atender las denuncias indígenas
En el mes de abril, se creó el Fondo de Emergencia para la Amazonía, cuyos recursos económicos se han proyectado la adquisición de pruebas rápidas para la detección de contagios, las medidas preventivas, la compra de alimentos y de suplementos para el personal médico, las comunicaciones de emergencia, rutas de evacuaciones, la protección a los territorios indígenas y los alimentos para las comunidades afectadas por la pandemia.
Para lograr este fondo de ayuda, estrellas de Hollywood decidieron solidarizarse y sumarse en la campaña, en la cual, los dirigentes indígenas hicieron llegar sus demandas. Así como lo hizo el actual presidente de AIDESEP (organización que representa más de 2000 comunidades en toda la Amazonía peruana, con 109 federaciones locales y 9 organizaciones regionales), quien informó la situación crítica que vienen sufriendo los pueblos indígenas en el marco de la pandemia del COVID-19, frente a espectadores de diferentes países que participaron de la transmisión en vivo de la iniciativa “Artistas Unidos por la Amazonía”.
“Nuestros hermanos están muriendo, nuestros hermanos están en cama, enfermos y eso nos preocupa bastante. Yo, que viví en carne propia con esta enfermedad, con este virus COVID 19 me siento muy preocupado por mis hermanos. Por eso, hemos hecho llegar nuestras demandas y propuestas al Estado Peruano y pedimos la atención sanitaria inmediata y diferenciada” así lo señaló Lizardo Cauper, líder indígena Shipibo y actual presidente de AIDESEP.
El líder indígena shipibo logró pedir al gobierno peruano detener las actividades extractivas que ponen en riesgo el territorio y las comunidades. “El gobierno peruano tiene que detener todas las actividades extractivas, todas las empresas mineras, forestales o petroleras. Por ejemplo, Ocho Sur (grupo de palma aceitera ubicado en Ucayali) que sigue trabajando y pone en riesgo a nuestra población indígena por el contagio. También la empresa petrolera Geopark”, añadió Lizardo Cauper.
Otro ciudadano que exige atención para su comunidad nativa es Daniel Vela Collantes. “Pedimos su colaboración para poder atender a los hermanos Matsés que están en esta ciudad, para cubrir sus necesidades, la alimentación y el alojamiento, además de las medicinas porque algunos ya están enfermos. Para enfrentar a esta enfermedad y cumplir la cuarentena, necesitamos su colaboración, pedimos que nos apoyen” estas fueron sus palabras como jefe de la comunidad nativa Matsés varada en Iquitos, una de las ciudades con más contagios de COVID19 en todo el Perú.
SOS desde Ucayali, comunicadores indígenas piden ayuda
En las comunidades indígenas de Ucayali la señal de Internet no existe. Sin embargo, el Ministerio de Cultura del Perú solo difundió sobre el COVID-19 en lenguas indígenas desde su web. Por ello, los comunicadores indígenas, ante la falta de información y acceso a ella, asumieron la tarea de comunicar en su lengua por radio sobre la propagación del coronavirus, pero al hacerlo se enfermaron.
“Llevo 32 días contagiado por este mal covid-19, hace poco me han detectado a mí y a 5 miembros de mi familia. Vivo en carne propia esta enfermedad, así como yo, otros comunicadores indígenas, nos hemos contagiado cubriendo e informando a las comunidades indígenas desde la radio. (…) Hasta ahora 66 hermanos shipibos han muerto en la región de Ucayali, por falta de atención del Estado. Mis hermanos están muriendo.” denunció Ítalo García Murayari, comunicador indígena del pueblo Shipibo-Konibo.
Finalmente, Leila Salazar-López, Directora Ejecutiva de Amazon Watch, una de las ONG que están involucradas en el fondo amazónico, señaló: «La Amazonía y sus pueblos se encuentran en estado de emergencia debido al cambio climático y la pandemia del COVID-19, es un crimen contra naturaleza y contra la humanidad. Es un momento para que todos se unan y actúen en defensa de los bosques y en solidaridad con los pueblos indígenas y tradicionales de toda la Amazonía, quienes protegen la gran selva tropical y el clima para toda la humanidad y la vida en la Tierra».