Por: José Augusto Zevallos.

La amplia franja ribereña que circunda la antigua y otrora esplendorosa ciudad de Iquitos, es hoy una preocupación para muchos estudiosos que ven como las aguas de los ríos, cochas y quebradas van degradándose día a día, mes a mes, año a año. Y es que en Iquitos se encontraron elevados índices de coliformes totales y fecales, cromo hexavalente (Cr6) y derivados del petróleo en los ríos Nanay, Itaya, Amazonas y Moronacocha.

Los desagües de los distintos puntos de la ciudad,  sin excepción,  descargan en estos ríos y ocasionan graves inconvenientes de contaminación que afectan la flora y la fauna. Teniendo en cuenta que solo el 1% del agua en el mundo es dulce y de ese total solo 0,3% corresponde a las aguas superficiales de lagos, ríos y pantanos, una proporción muy pequeña pero cada vez más vulnerable a la contaminación que provocan nuestras actividades diarias.

Por donde te desplaces en Iquitos, de Este a Oeste, de Norte a Sur, uno se encuentra con este valioso líquido, básico y elemental para la existencia de vida en la tierra. En países sub desarrollados, el 80% de las enfermedades infecciosas y parasitarias gastrointestinales y una tercera parte de las defunciones causadas por éstas, se deben al uso y consumo de agua insalubre. La naturaleza ha sido incapaz por sí misma de neutralizar esta carga contaminante, por ello estas masas de agua han perdido sus condiciones naturales de apariencia física y su capacidad para sustentar una vida acuática adecuada, que responda al equilibrio ecológico que de ellas se espera para preservar los cuerpos de agua.

El problema de contaminación en la zona de Belén se agudiza y es más notorio en época de vaciante o “merma” del río Itaya, pues se acumulan residuos sólidos y efluentes líquidos al final de los vertederos de las aguas servidas formando lagunas naturales de oxidación cercanas al río, las cuales sin ningún tratamiento  son desplazadas hacia éste contaminándolo seriamente, la cual puede afectar a largo plazo en forma irreversible o costosa al ser humano. Considerando que el agua del río Itaya es empleada para consumo e higiene, así como para fines recreativos y como cuerpo de agua dulce, tendremos que estas aguas estarían afectando la salud y bienestar de los pobladores que la consumen, la subsistencia de los peces que ya de por sí, no son aptos para el consumo humano y provocando la alteración gradual de su equilibrio ecológico, a causa de efluentes contaminados. También se encontró una considerable cantidad de materia orgánica degradable y elevada presencia de materia inorgánica en dichas aguas.

En análisis microbiológicos de los cuerpos de agua de la carretera Iquitos-Nauta, Quistococha, Santo Tomas y Rumococha se determinó que existen niveles bajos de contaminación por coliformes, con valores que van de 4 a 43 UFC/100 ml. En los cuerpos de agua aledaños a la ciudad de Iquitos, en el Lago Morona Cocha, río Itaya, río Amazonas y Nanay se presentaron niveles significativos de Coliformes totales y fecales. El río Itaya se encuentra contaminado por nitratos y bacterias. Los niveles se encuentran por encima de los límites permisibles para todos los usos de agua según la Ley General de Aguas.

Conocer la calidad microbiológica resulta de gran relevancia por el riesgo que resulta de la ingesta directa de agua contaminada con bacterias patógenas como: Escherichia coli (E.Coli), cuyas mayores concentraciones en el río Itaya se registraron en la desembocadura de la quebrada (caño) del mercado de Belén – río Itaya  12 con 490000 NMP/100 ml, en la desembocadura de la quebrada (caño) Sachachorro – Rio Itaya 10 con 3300000 NMP/100 ml, en la desembocadura de la quebrada (caño) proveniente del distrito de Belén, frente al Caserío de San Francisco, río Itaya  con 3300000 NMP/ 100 ml y en la desembocadura de la quebrada (caño) proveniente del AA.HH 28 de Julio RItay07 con 490000 NMP/ ml. El punto muestreado 08 frente al caserío San Francisco presenta 3 300 000 NPM/100 ml, 100 veces más que los límites permisibles.

Un informe del Instituto de Investigación de la Amazonía (IIAP) revela que las aguas de la laguna Moronacocha (Loreto) poseen coliformes totales y fecales por encima del límite permisible, por lo que sus aguas y los peces extraídos de este lugar no son aptos para el consumo humano.

Esta realidad se da debido a que en esta laguna desemboca el túnel de desagüe de todas las vías vecinas, además de desechos industriales y del transporte fluvial. La situación empeora cuando en épocas de creciente de los ríos, este espacio se convierte en zona de pescadores informales, que por más de 30 años vienen realizando esta actividad.

PORCENTAJE DE INFECCIONES GASTROINTESTINALES Y HEPATITIS ATRIBUIBLES AL AGUA Y ALIMENTOS.

ENFERMEDAD

AGUA (%)

ALIMENTOS (%)
Cólera 90 10
Girdiasis 90 10
Hepatitis A* 90* 10*
Amebiasis Intestinal 80 20
Abceso hepático amebiano* 80* 20*
Shigelosis 80 20
Otras infecciones intestinales 70 30
Fiebre tifoidea 20 80
Por Protozoarios 10 90
Otras helmintiasis 10* 90*
Ascariasis* 10* 90*
Oxiuriasis 10* 90*
Paratifoidea y otra salmonelosis 5 95
Intoxicación alimentaria bacteriana

0

100

Este es un tema que debería ser de total interés para las autoridades regionales y nacionales ya que Iquitos es una de las regiones que más ha aportado al Estado peruano, la ciudadanía y la región Loreto se lo merecen, el agua es un derecho fundamental para la vida.