Y que entregue lo que piden quienes le mantienen en cautiverio
Todos los que estuvieron al momento del secuestro tienen la misma versión: llegaron directamente donde César Ríos Ramírez y uno de los encapuchados dijo: “Es por una deuda que tiene tu padre con nosotros”. Serafín Otero García, quien estaba al lado de César, inicialmente creyó que se trataba de una broma. Cuando comenzaron a quitarles todas sus pertenencias se dieron cuenta que todo iba en serio. El único que se quedó con su teléfono celular fue Samuel Dacosta Vergara porque tenía el aparato en el pantalón lejos de él.
“Estábamos en el pontón luego de esquiar y llegaron gritando groserías y diciendo este es el hijo de César que nos tiene una cuenta, seis personas con cinco timbos de combustible lo que quiere decir que van a navegar, no han llegado a robar sino agarraron las mochilas porque ahí estaban los celulares, a todos nos tiraron al piso y nos puteaban, se llevaron los dos mil dólares que teníamos para pagar al profesor de Bielorusia que llegó para darnos algunas clases, las niñas han quedado traumadas”, ha narrado uno de los testigos que prefiere mantener su nombre en reserva.
Fue Samuel D. quien informó del hecho a la Capitanía de Puerto y avisó al padre del secuestrado. Por eso es que César Ríos llegó a los pocos minutos al balneario de Santo Tomás.
La Policía ya tiene todos los testimonios. La misma noche del lunes por lo menos tres testigos se fueron voluntariamente a la Policía. César, el padre, les ha pedido que ayuden de esta forma a ubicar a su hijo. Se pensaba inicialmente que varios de los testigos no querían declarar por temor a posibles represalias de los secuestradores. Pero el martes ya se tenía la manifestación de la mayoría y la Policía tiene los elementos del hecho.
Las clases de esquí iban a terminar el viernes. Pero tanto el profesor bieloruso como el que lo acompañaba y hacía las veces de traductor, Stefano Monteverde, han regresado a Lima porque también se han llevado el susto de su vida. No es para menos. Porque los secuestradores llegaron con revólveres y lo que se conoce como “armas largas”, es decir metralletas y se los notaba que tenían el objetivo claro.
Pro & Contra ha conversado con varios de los que estuvieron al momento del secuestro. Y todos han dicho que nunca se hubieran imaginado una situación como la que vivieron. Entre los presentes estaban incluso algunas menores de edad que, junto con sus padres, practican sky.
Camilo Vinatea es un oficial de la Policía en situación de retiro. Fue el que participó en el rescate del año 2010 al empresario Herman Pezo Rentería. Le hemos solicitado una explicación y cuáles sería el desenlace que buscarían los secuestradores. Se ha disculpado de emitir cualquier comentario. También hemos solicitado la versión del jefe regional de Loreto de Seguridad Ciudadana, Abner Vásquez Solórzano, coincidió en que no puede dar ningún detalle por razones de seguridad. Sin embargo, como los secuestradores han usado el río para emprender la fuga del lugar, conocedores de la navegación en la zona han señalado a Pro & Contra que “los ríos hablan, todos saben lo que sucede en los ríos y en las “zacaritas”, no tienen escapatoria por el Nanay”.
Pro & Contra ha conocido por dos fuentes consultadas que los secuestradores han permitido que el joven César Ríos Jr. se comunique con su padre. Lo ha hecho en la madrugada del martes. Habló escuetamente y le ha dicho a su papá que entregue lo que le piden los secuestradores. Que no coordine nada con la Policía Nacional. Como es obvio, se le notaba nervioso pero se le entendía lo que hablaba, ha dicho uno de los que estuvo con el empresario de combustible al momento de la llamada. Se habla de otros detalles del secuestro y sus motivaciones pero las diversas versiones no han podido ser cotejadas y las fuentes consultadas no han respondido para ratificar lo mismo. Sí se sabe que todos están preocupados para que se rescate con vida a César Ríos Ramírez.
