Durante la conferencia de su libro «Pecho Frío», el periodista recordó las virtudes del intelectual fallecido el último 27 de julio a causa de una fibrosis pulmonar. «Era un hombre culto, no le asustaba ir contra la corriente, ni estar en minoría. Era un agudo provocador», recordó.
Entre las grandes entrevistas que Jaime Bayly tuvo con su programa «El Francotirador», hay una que recuerda con mucho afecto, la de Marco Aurelio Denegri. «Era un hombre al que respeté y admiré mucho», exclamó el escritor durante su presentación en la FIL Lima 2018.
Durante la conferencia de su libro «Pecho Frío», el periodista recordó las virtudes del intelectual fallecido el último 27 de julio a causa de una fibrosis pulmonar. «Era un hombre culto, no le asustaba ir contra la corriente, ni estar en minoría. Era un agudo provocador», recordó.
«A mí me desplumó más de una vez», continuó. «Despellejaba sin compasión mis libros, pero era una mirada profundamente ilustrada, la de Marco Aurelio», agrega, reflejando una gran admiración por Denegri. Jaime Bayly considera que el recordado conductor de «La Función de la palabra», era «un ave rara en el Perú, porque era un hombre culto, que leía y que se atrevía a decir lo que pensaba sin preocuparse por caer bien a los demás». El popular «Niño Terrible», no se guardó ningún detalle al momento de recordar a Denegri y se animó a destacar que «era un hombre que celebraba las virtudes del onanismo», agregó.
«Es algo que me dijo cuándo lo entrevisté y no le molestaba ocultarlo», rememora Bayly. «Estaba dispuesto a siempre alegar a favor de la masturbación porque consideraba que te desasnaba, espabilaba, te permitía reconocer tu identidad y reconciliarte con tus sueños», acotó.
Además, Jaime Bayly considera que su pérdida debería enseñarnos a cambiar los ídolos que los peruanos tenemos por defecto. «Ojalá el Perú admirara a gente como Marco Aurelio Denegri», dice.
«En el colegio nos enseñan a admirar a héroes militares, generalotes, espadones o caudillos políticos, lo cual considero un gran error», reflexiona Bayly. «Hay que buscar la sabiduría y la belleza, en el arte, en los pensadores, en los poetas, en los pintores, músicos, cineastas, en los museos y en las bibliotecas. Algo que hizo sabiamente Marco Aurelio Denegri», finalizó.