El Ministerio Público dio a conocer ayer los nombres de dos presuntos involucrados en el asesinato del ciudadano canadiense Sebastian Woodroffe, quien fue linchado en Ucayali tras el crimen de Olivia Arévalo, lideresa de la etnia shipibo-konibo.
El presidente de la Junta de Fiscales Superiores de esta región, Ricardo Jiménez Flores, dijo que luego de visualizar el video que circula en las redes sociales, donde se aprecia a una turba atacando al extranjero, pidieron la detención preliminar de José Ramírez Rodríguez y Nicolás Mori Guimaraes.
Ambos pertenecen a la comunidad intercultural Victoria Gracia de la localidad de Yarinacocha, en Ucayali. Según el funcionario, ellos sospechaban que Woodroffe había matado a Arévalo, por lo cual lo atacaron hasta causarle la muerte. En el video se ve a otras 15 personas alrededor. “Seguimos indagando para confirmar o descartar esta versión. Recién tenemos dos días de investigación”, dijo Jiménez en entrevista con RPP.
Hasta el fin de semana, la Policía Nacional manejaba dos hipótesis respecto al crimen de la lideresa indígena: la primera daba cuenta de que Woodroffe la asesinó luego de que ella se negara a hacer una sesión de ayahuasca; la segunda, que la mató debido a una deuda.
Esta última versión fue negada por los familiares de Arévalo.
El cadáver del canadiense fue encontrado el sábado último a un kilómetro de San Pablo de Tushmo, centro poblado donde vivía la lideresa indígena. Tras ello, fue trasladado a la morgue de Pucallpa, donde se le practicó una prueba de absorción atómica para determinar si efectivamente disparó contra la mujer.
Esta prueba fue enviada a Huancayo, en Junín. Al cierre de esta nota, las autoridades no habían informado sobre sus resultados.