Falta de agua potable hace vulnerables a las personas a que puedan contraer enfermedades gastrointestinales o aquellas que se producen por picaduras de mosquitos que dejan sus larvas en el agua almacenada.
Iquitos, marzo de 2017. Las altas temperaturas y las dificultades que tiene una parte de la población para acceder a servicios de saneamiento, produce un aumento la presencia de bacterias y microbios presentes en el agua que bebemos, en la que usamos para lavar nuestros alimentos y en diferentes rincones del hogar.
Muchas enfermedades pueden transmitirse por la contaminación del agua que bebemos o la que usamos para lavar los alimentos. Para evitar contraer alguna enfermedad que afecte a los más pequeños del hogar o a nuestros abuelitos, puedes seguir las siguientes recomendaciones que nos da el doctor Hugo Siu, médico infectólogo y especialista en medicina ambiental:
- Lava bien los recipientes donde almacenas el agua de consumo y de cocina.
- Aplica 3 gotas de lejía por un litro de agua si es agua clara y 5 gotas si es agua turbia. Luego déjala reposar durante 30 minutos.
- Lava bien las frutas y verduras que usarás para preparar los alimentos para tu familia. Sumérgelas en un recipiente con 5 litros de agua y 1 ½ cucharada de lejía. Déjalas reposar por 2 minutos.
- Tapa bien los recipientes donde almacenas agua y los alimentos así desinfectados para que ningún insecto o suciedad se pose en ellos.
- No olvides lavarte las manos antes y después de ir al baño.
Estos sencillos consejos ayudarán a tu familia a mantener alejadas muchas enfermedades.