Señora se aprestaba a ingresar a su domicilio y con pistola en mano le asaltaron
La victima Dany Panduro llorando y adolorida por los golpes y heridas porque fue arrastrada y jaloneada por sus asaltantes estuvo en todo momento nerviosa y llorosa, pero pese a esa situación pudo identificar a los tres integrantes de esta banda.
En la vereda de su domicilio fue intersectada por tres delincuentes armados la señora Dany Panduro grandes (38), a quien le arrebataron su bolso y se dieron a la fuga amenazándola en todo momento con dispararla con un arma de fuego.
Era la una de la madrugada cuando sorpresivamente a bordo de un motocarro le cerraron al momento en que se alistaba a ingresar a su vivienda de la calle Piura en el distrito de Punchana. Fueron 3 los malhechores que le asaltaron y le despojaron de su pertenencia para luego emprender la fuga a bordo del vehículo que les esperaba con el motor encendido con rumbo a la avenida La Marina.
La víctima, profesora de profesión, retornaba a su vivienda luego de haber estado en un centro de diversión nocturno cuando estos desalmados la arrastraron para despojarle de sus pertenencias. Los jóvenes pero avezados delincuentes creyeron haberse salido con la suya tras sus fechorías y cuando se preparaban a disfrutar del botín, fueron intervenidos por efectivos policiales que ya les seguían los pasos pues eran conocidos por los constantes robos en que participaron.
Los efectivos policiales tuvieron que hacer disparos al aire para reducir a los integrantes de esta banda juvenil de asaltantes quienes al verse rodeado se rindieron ante la autoridad, en los cruces de San José con La Marina, a unos pasos de la comisaria de Punchana. En sus manos se encontró la cartera de la víctima.
Los integrantes de esta banda fueron identificados como: Segundo Ernesto Rojas Valderrama (25), Juan Gabriel Ríos Sifuentes (23) y Pablo Antosac Huansi. Quienes estaban a bordo de un motocarro nuevo de color azul.
Estos asaltantes venían siendo seguidos desde hace varias semanas por personal de inteligencia de la Comisaría de Moronacocha, ya que tenían como zona de acción donde captar a sus víctimas las inmediaciones del local La Habana, a quienes seguían hasta una calle solitaria y en horas de la madrugada para robarles sus pertenencias.