Cada parto es único y cada mujer lo vive de una manera diferente.
Conocer las diferentes fases del parto y saber qué ocurrirá en cada una de ellas, te ayudará a enfrentarte al nacimiento de tu bebé con menos inquietud.
Dilatación: En madres primerizas, el borrado del cuello del útero y la dilatación puede durar varios días. Durante este tiempo, el cuello de la matriz tiene que ensancharse totalmente para permitir la salida del bebé.
El borrado consiste en el acortamiento del cuello del útero, una vez que ha sucedido esto, comienza la etapa de la dilatación, que a su vez se divide en dilatación pasiva y dilatación activa. Habrás de dilatar de 0 a 10 centímetros en todo el proceso y esto, no sólo lleva su tiempo, sino que además viene acompañado de contracciones. Durante la dilatación pasiva, en la que se dilata de 0 a 3 centímetros, las contracciones se producen de forma irregular y con una intensidad media. El dolor de las contracciones varía en cada mujer.
Esta etapa de dilatación es conveniente vivirla en casa o en un ambiente tranquilo fuera del hospital. Intenta distraerte, darte una ducha, ver una película e incluso dormir para ganar fuerzas suficientes para el parto. Hasta que las contracciones no se produzcan cada 5 minutos durante al menos, un período de una hora no es aconsejable acudir al hospital.
En la dilatación activa, el cuello del útero se dilata de 3 a 10 centímetros. Las contracciones serán más frecuentes e intensas. En etapa del parto es cuando te administrarán la anestesia epidural si así lo deseas.
Expulsión: Cuando ya estás totalmente dilatada, llega la fase de expulsión. El médico te orientará sobre el momento en el que habrás de empujar para ir ayudando al bebé a bajar por el canal del parto. Con cada contracción habrás de empujar lo más fuerte que puedas. Nunca empujes con la cara y el cuello, la fuerza ha de estar en la zona abdominal y en los genitales.
La duración de la etapa del expulsivo depende de cada mujer pero puede oscilar entre unos minutos y una hora. Cuando de un pujo saques la cabeza del bebé, el personal le limpiará las vías y comprobará que el cordón umbilical está libre. Ya sólo queda un pujo para sacar los hombros y el resto saldrá solo. En ese momento, te pondrán al bebé encima para que puedas verle antes de llevárselo a realizar el test de Apgar y vestirle.
Alumbramiento: La fase de expulsión de la placenta marca el final del parto. El médico te realizará un masaje en el bajo vientre y presionará para poder extraer la placenta. Pueden incluso pedirte que empujes un poquito más para que pueda salir.