Para muchas mujeres la maternidad representa una etapa importante en su vida y les causa mucha ilusión quedar embarazadas. Sin embargo, no siempre es tan fácil quedar embarazada por problemas de ovulación, endometriosis, obstrucción de trompas, entre otras causas físicas que presentan algunas mujeres en el intento.
Si en tu caso, eres una persona totalmente sana y no logras la gestación, posiblemente, tienes un par de hábitos que te lo están impidiendo; a continuación te decimos cuáles:
- Levantarte de la cama tras el acto sexual: procura quedarte acostada al menos 20 minutos al finalizar, eso facilita que los espermatozoides alcance al óvulo.
- No tener relaciones sexuales con frecuencia, más en días fértiles: utiliza kits de ovulación para saber con precisión en qué días estás ovulando e intentarlo en esos días.
- Fumar e ingerir bebidas alcohólicas con frecuencias: disminuye las posibilidades de quedar embaraza, además de aumentar el riego de un aborto. En el caso de los hombres, afectan la calidad de los espermatozoides.
- Ansiedad: en ocasiones al fracasar en el intento, tu cuerpo se estresa e impide la fecundación, busca la forma de estar tranquila y despreocupada al respecto.
- Exceso de ejercicio: tu metabolismo se acelera y demanda mayor energía, pon rutinas más tranquilas.
- Ropa interior muy ajustada: estar propensa a la sudoración y la aparición de infecciones. Utilizar ropa interior de algodón que sea cómoda y mantener una buena higiene.
- Peso corporal inadecuado: está muy delgada o tienes sobre peso, ese desequilibrio afecta a si sistema hormonal, generando una irregularidad en tu menstruación.
Ahora ya lo sabes, un pequeño cambio puede marcar la diferencia, estos pasos te ayudarán a preparar tu cuerpo para el embarazo, y así tener un bebé saludable. No olvides consultar a tu médico.