Actualmente entre los altos niveles de contaminación de la ciudad, el trabajo estresante y el poco tiempo libre que queda es difícil dedicar un momento para el cuidado de nuestra piel.

Entre la amplia gama de aceites, está el de semilla de uva que trae muchos beneficios a la piel y puede ser un aliado en el cuidado, además de ser un producto económico, fácil de encontrar y de usar.

Uno de sus beneficios es su rico contenido en antioxidantes lo que ayuda a combatir los radicales libres del ambiente que dañan la piel y la protege; además de que  la penetra con rapidez y no tiene prácticamente olor, por lo que no suele irritar y se puede aplicar directamente en el rostro, cuello, brazos, piernas, pies o manos.

Otro beneficio que se le atribuye al aceite de semilla de uva es que disminuye las reacciones alérgicas de la piel, debido a los flavonoides que contiene, estos son antimicrobianos, es decir, sustancias que actúan como antibacterianas o antivirales.

También se puede usar como desmaquillante de ojos, porque el aceite tiene la habilidad de deshacer el maquillaje y humectar la zona del ojo a la vez, además de ayudar a acondicionar las pestañas y, con el tiempo, las hará crecer más y con más fuerza. No es necesario usar grandes cantidades, pues con una pequeña porción ofrece los mismos beneficios a largo plazo.

El último beneficio, pero no menos importante, es que protege el colágeno natural de la piel que durante el proceso de envejecimiento disminuye y la piel comienza a decaer; por lo que aplicar un poco todos los días ayuda a mantener la piel joven y con un nivel de elasticidad equilibrada. Otra opción para usar el aceite es como acondicionador para el cabello y el cuero cabelludo, que mantiene el cabello con brillo y fuerza, evitando la caída.

Es una solución natural que se encuentra de manera fácil en los supermercados o tiendas naturales, tiene muchos beneficios para el cuidado de la piel, y no necesita usarse en exceso, por lo que rinde mucho por un bajo costo.