Un premio nobel en Iquitos
El consagrado autor de varias novelas ambientadas en la vasta Amazonía, Mario Vargas Llosa, no ha dejado de visitar la ciudad de Iquitos. De vez en cuando regresa a la urbe del trópico que le seduce por su colorido, sus gentes, y se encuentra con amigos, con conocidos.
La última vez que estuvo en estos lares, todavía no había conseguido el máximo lauro de la literatura mundial, pero ya había ganado numerosos y prestigiosos premios literarios. Era ya el peruano más universal, gracias a su talento, a su cotidiano ejercicio de las letras. En esa ocasión visitó el formidable paisaje de la Reserva Pacaya-Samiria, y se bañó en esas aguas edénicas, como buscando la sumergida fuerza de los dioses para que le bendijeran y le trajeran suerte en los días de su vida.
