Su rostro parece de funcionario gris, que está empecinado en la hora de marcar la tarjeta de la chamba y salir del trabajo a su casa, que tiene hobbies como el de coleccionar maquetas de barcos y aviones. Escrupuloso de los procedimientos pero  que escucha a todo quien reclama y resuelve con ponderación. Además sus trajes dicen mucho de él, muy circunspecto y difícil para la risa fácil, de los chascarrillos entre colegas o compañeros, los mira con indiferencia. Es un hombre serio. Que por lo que aparenta no admite sinecuras como su compañero de al lado [a García Pérez se le nota a leguas que no es trigo limpio, por ejemplo]. Da la impresión que de su vida privada se sabe poco o simplemente no tiene o tiene poco que contar ni un accidente casero como que el carro al momento de venir al trabajo tenía las ruedas desinfladas, está avocado a su trabajo en esa jaula de hierro que hablaba Max Weber. Un hombre sin atributos, presumiblemente. Uno puede imaginar eso y mucho más sobre este personaje con sólo mirar una foto de Francois Hollande, el presidente de Francia. Con la cara, aparente, de seriedad, un burócrata de libro, este hombre discreto ha sabido conquistar los corazones (sentimientos) de bellas mujeres como es el caso de Segolene Royale, Valérie Trierweiler y, la reciente vista a la luz, la actriz Julie Gayet, (aunque el rumor es que los escarceos y roces con la actriz venían desde hace dos años más o menos). Hay algunos amigos en plan chacota [atufados de machismo] piden que escriba un manual como el de Ovidio, “El arte de amar”, seguro que sería un éxitos de ventas. Pero ese lío de alcoba ha traspasado los espacios del poder y está en las revistas rosas como le pasó al expresidente Clinton, Berlusconi y otros. En el caso de Perú, a García Pérez y Toledo pasaron por lo mismo con diferentes matices. El más patético fue el de García que amenaza ser presidente otra vez – que empecinado el tío, dios no lo quiera (pero mi oposición no es por su incontinencia sexual si no por sus retorcidas ideas y la corrupción que siempre le rodea). Me parece que estos mandatarios tienen vida privada y no hay que hacer más escarnio pero el morbo por lo que sucede en la alcoba puede más.

http://notasdenavegacion.wordpress.com/