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Accidentes, infecciones, cirugía, lesiones o inflamación del tejido, pueden ser algunas de las principales causas de que tengamos heridas. Sin embargo, algunas heridas tardan más en cicatrizar que otras, y esto depende de diversos factores, entre ellos, la localización y dirección de la herida, el tipo de lesión, la edad de la persona y su estado nutricional entre otros.

Es por eso que a continuación te compartiremos algunos remedios caseros para ayudar a cicatrizar esas heridas que son un poco más difíciles de sanar:

  1. Ajo como cicatrizante

El ajo tiene grandes propiedades cicatrizantes, entre ellas la antibacteriana, la cual te protege de infecciones.

Remedio casero: Mezcla tres dientes de ajo en una taza de vino, deja reposar por dos horas y luego aplica sobre la herida, dos veces al día. Otra alternativa es frotar el ajo en la piel pero debes tener cuidado de no causar irritación.

  1. Cebolla

Tiene propiedades similares a las del ajo, a excepción de que es menos fuerte y no irrita la piel.

Remedio casero: En una licuadora o procesadora mezcla media cebolla y dos cucharadas de miel de abeja. Aplica la mezcla sobre la herida y espera por una hora. Repite la misma operación tres veces al día.

  1. Miel de abeja

La miel tiene la capacidad de deshidratar los agentes malignos, limpiar la piel y dejar la piel suave, por lo que es perfecta para ayudar a cicatrizar.

Remedios caseros: Coloca un poco de miel en la herida y deja que la piel la absorba. Retira con agua tibia.