Ya han pasado tres lustros. Poquita cosa si creemos que la resaca de todo lo vivido se olvida con los años. Quince años desde que una tarde de marzo Lula me transmitió la fatal noticia: papá ha muerto. Desde ese día no he vuelto a sentir dolor similar. Dolor doloroso, redundante pues, porque de todos los dolores ese ha dolido más. En fondo, forma, largo y ancho. Medido con cualquier sistema métrico decimal siempre será el peor de los dolores.

Y ya van quince años que la víspera de los 18 de marzo cierro los ojos y simulo ser un invidente que deja correr los dedos por el ordenador y siento su presencia en esta sala, en este asiento y en este ambiente en cuya pared se ha colocado la mejor foto que lo inmortaliza. Así lo recordamos. Robusto, pucacho, introvertido hasta la desesperación, extrovertido cuando le daba la gana, desordenado con la billetera cuando la tenía y ordenado cuando le antojaba.

Desde que se fue creo escuchar su voz, sentir su sudor, añorar sus consejos para con el deporte y lo extradeportivo. Sus temores impregnados de temblores táctiles que le hacían inolvidable. Che Carlitos, que grande que sos vos. Y vaya que fuiste grande en tu humildad y en tu abundancia. Eras sacolargo cuando debías serlo, machista cuando las circunstancias exigían, tierno en contadas oportunidades. Pero grande pues. Así de enorme y simple.

Este quinceañero nos coge apesadumbrados, es cierto. Para que negarlo. Pero firmes y felices por la unión en medio de la dispersión. Y convencidos que todos tenemos un padre, único para cada uno. Y cuando observo que tengo la mediana facultad de escribir tonta, tierna e infantilmente creo que lo aquí escrito lo podrá leer donde se encuentre. Porque si de algo me arrepiento en estos días es no haberle dicho todas las veces que lo sentía lo mucho que le quería y necesitaba y que me invade cierto dolor porque estoy seguro que eso lo hubiera hecho más feliz de lo que fue con su esposa, hijos y nietos, aunque a algunos de ellos ya no pudo conocer porque le ataco un derrame un 15 de enero que le provocó la muerte un 18 de marzo, un día como hoy que nunca se borrara de mi mente como no se borran sus enseñanzas, añoranzas y más.

3 COMENTARIOS

  1. Conoci a tu papá y de igual manera te acompaño en su recuerdo de aniversario de su partida, saludos a Doris a pesar de la distancia que nos separa. Lita.

  2. BUEN AMIGO, Y UNA BUENA CHISPA QUE TENIA TU PAPA…UNA ORACION POR SU ALMA.

  3. Te acompano en el recuerdo de tu querido PADRE,un saludo a tu numerosa familia,que este aniversario de la partida de su PAPA,una mas a tu familia.Nixon Flores-USA

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