Escribe: Jorge Carrillo Rojas

A poco menos de tres semanas para el cambio de gobierno y con el presidente Pedro Pablo Kuczynski con credenciales en mano y la transferencia ya en curso, lo mínimo que debemos esperar de aquellos que tiene a su cargo este proceso burocrático en Loreto, es que el mismo sea lo más transparente posible.

Sin embargo, es necesario también estar muy atentos a quienes ocuparán los cargos públicos que dependen del gobierno central. Es necesario que aquellos que lo ocupen sean profesionales probos y si son de la región mucho mejor, pero si es necesario tomar profesionales de otras partes del país, que estos vengan a sumar, no a restar y mucho menos a tratar de maltratar a la gente.

Ya es tiempo de no dejar que nos pisen el remo. Ya es tiempo que los trabajadores sindicalizados o no, paren los abusos de aquellos (as) venidos de afuera que por ejercer un cargo creen que pueden hacer y tratar como quieran a los trabajadores. Y es absoluta responsabilidad de los propios servidores públicos evitar y parar estos abusos.

Es inconcebible que, por ejemplo, algunos jefes (as) de dependencias públicas no sepan su función. Pareciera como si el cargo les hubiese llegado como una suerte de rifa o por ayuda de vaya uno a saber quién. Ineptitud que, muchas veces, son los propios trabajadores timoratos quienes terminan por apañar y avalar, así como por ejemplo el maltrato del que son objetos.

Es tiempo además que los propios periodistas y medios de comunicación miremos más allá de las gestiones regional y municipal. Ahí están dependencias como Qali Warma, Beca 18, Cuna Más, Pensión 65, Juntos, Sunafil y otros más en el que no se sabe qué pasa. Dependencias de mucha importancia en la que algunos jefes, recurren al ya famoso: no tengo autorización para declarar. Será quizá para evitar la fiscalización de los medios o de los propios ciudadanos a lo que los jefes deberían estar acostumbrados. O es que quizá algo esconden o temen que se sepa.

Así pues, es necesario que en este próximo quinquenio de gobierno se designen a personas idóneas para los cargos públicos. No mandar de fuera, “profesionales” que no saben dónde están parados que lo único que hacen es hacer vida social y chatear aprovechando los bienes del estado.

La expectativa en este nuevo gobierno es alta. Ojalá que sepan elegir y no seguir con el pago de favor por apoyo en campaña y se termine designando gente incapaz como la que, por ejemplo, nos envió este gobierno que ya se va.

 Ya es tiempo de que los profesionales nuestros se sientan capaces de ocupar un cargo y que la masa laboral se ponga los pantalones y faldas para parar los abusos de los que ya han sido objetos por algunos jefes (as) que tratan de dejar de lado su incapacidad por el cargo, maltratando a nuestros trabajadores.

Dios quiera que desde el 28 de julio de este año nuevos vientos empiecen a soplar en esta parte de la región que tanto lo necesita. Busquemos crecer como región y esa es una responsabilidad de todos. No desaprovechemos estos cinco años más aun teniendo como presidente a alguien que conoce nuestra realidad, tal como nos lo ha dicho en sus discursos en tiempo de campaña.

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