Paolo Guerrero regresó a la selección peruana que superó con claridad a Arabia Saudita (0-3) guiado por el delantero, habilitado para jugar después de que el Tribunal Federal de Suiza suspendiera la sanción por dopaje que semanas atrás le impuso el TAS.

Paolo Guerrero volvió y marcó. Estuvo una hora sobre el césped del estadio AFG Arena de Saint Gallen. Anotó dos tantos y dejó su sitio a Jefferson Farfán.

La presencia del atacante fue una de los grandes alicientes del compromiso de la selección peruana, que acumula ya catorce encuentros sin perder. No encaja una derrota desde el 15 de noviembre del 2016. Suma diez triunfos y cuatro empates.

Paolo Guerrero regresó al combinado de Ricardo Gareca 236 días después, una vez que el Tribunal Federal de Suiza suspendiera la sanción por dopaje que semanas atrás le impuso el TAS. En noviembre pasado, el delantero peruano dio positivo por benzoilecgonina, un metabolito prohibido por la FIFA que se encuentra en la cocaína, en un control antidopaje tras el partido de clasificación para el Mundial contra Argentina.

La selección peruana, que debutará en el torneo mundialista el 16 de junio contra Dinamarca en Sharansk y después se medirá a Francia y Australia, dominó el encuentro desde el principio. La ordenada presión efectuada por el cuadro de Gareca complicó la capacidad de maniobra de su rival.