Algarada negligente

Por Miguel Donayre Pinedo

Los telediarios pasaban las imágenes de los mineros rescatados de las profundidades de la tierra en Chile. Algarabía. Fiesta colectiva. Que bien que hayan salido todos vivos, nadie creo que esté en contra de eso. Me alegré un montón. Como los estoicos lo que sucede en el mundo, en la gran ciudad, me pertenece por su condición humana. Pero sí que molesta el festín político de todo eso y el nacionalismo pueril de los alrededores de la mina. No entendía esos cánticos a favor de su país cuando esas mismas autoridades dejaron funcionar una mina informal sin que tuviera las condiciones laborales mínimas. Fue muy elocuente que uno de los mineros le dijo al presidente de esa república sureña, que esto no vuelva a pasar.  Es cierto, que no vuelva a pasar nunca más. Que una negligencia funcional de la Administración no se tapa con una algarada nacionalista. Así no.