Viajeros de tren (3)

Por Miguel Donayre Pinedo

En el camino por algunas ciudades del sur francés consultaba las noticias de Perú por Internet. Me quedé asombrado de lo que sostenía sin ningún empacho el cocinero Gastón Acurio. No se sí por un alarde de optimismo o era, francamente, una declaración política. Él sostenía, otra vez la misma cantaleta, que Perú podría ser una potencia mundial en los próximos diez años. No daba crédito a lo que leía porqué en el mismo diario se publicaba que habían muerto muchos niños por la ola de frío en la región andina. Sí un país no puede dar cobijo a los niños y niñas por una ola de frío, toda pretensión o sueño de ser país del primer mundo deja mucho que desear y debe quedar en silencio. La niñez que es el futuro de un país y están en abandono, en la orfandad. Como se diría en buen castellano, cocinero a los fogones. Ha sido muy intrépido, de un optimismo banal y malsano.

2 COMENTARIOS

  1. Totalmente de acuerdo. Cuando escucho sus declaraciones, me parecen excesivas de optimismo. Me resulta difícil digerir aquella predicción sobrevalorada-¡ y en 10 años!- frente a tanta desigualdad social y de riqueza y con semejantes índices de corrupción. Zapatero a tus zapatos o mejor dicho cocinero a tu cocina.

    • yo lei la entrevista completa y lo que dijo fue que era un deber de todos los peruanos de hacer todo lo que haga falta por colocar al peru en el primer mundo antes de cumplir el bicentenario de la independencia. que no podiamos seguir dejandole la responsabilidad a los politicos. que era una tarea de todos en cada uno de nuestros actos. no dijo que llegariamos al primer mundo. dijo que era nuestro deber el proponernosolo. y lo dijo muy claro. eso nada tiene que ver con decir que llegaremos en diez años al primero mundo.

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