¿Y si el problema somos los electores?

Estamos a menos de dos meses para las elecciones municipales y regionales y el panorama preocupa.  La orfandad de ideas, la superficialidad, la actitud folclórica y la payasada continúan siendo moneda corriente. De nada sirven debates o intentos por tratar de discutir planes que no existen, por más bienintencionado que estos fueran. Los candidatos están jugando otro partido y en medio de él no funciona la coherencia, la solidez ni la seriedad.

Pensar en un plan de gobierno no es aprovisionarse de una serie de eslóganes  vaciados de contenidos y resumirlos en una cantidad de hojas impresas. Tampoco son lemas que se gritan en las calles y se reiteran en los mítines, como si fueran gritos de guerra o llamados para entrar al circo. En principio, lo que no se hecho es profesionalizar o adecentar la política. 

Al final, este triste panorama se resume en el abanico de sin-propuestas o anti-propuestas.   En medio de todo, el supremo titiritero mueve los hilos del morbo y el sensacionalismo (y algunos proveedores sin escrúpulos se frotan alharaquientamente las manos).

Claro, mucho decimos y nos hacemos los elegantes o distinguidos señalando que la campaña – y en general la política – debería comprender, de modo concreto, coherente y sustentable, la forma y el fondo de las medidas cruciales para el futuro de nuestra región. Además, con mucha preocupación patriótica o regionalista nos damos golpes de pecho y criticamos como desesperados que se mecen el pelo. En tanto, los candidatos llenan el escenario con alcohol, música estridente y vulgaridades o destrezas canoras diversas. En ese sentido, no sería inadecuado creer que en vez de elegir alcaldes o un presidente regional estamos optando por los mejores showman de la coyuntura.

Los problemas son muy fuertes tanto por la falta de planificación como por los recursos humanos ineficientes para esa planeación. Existen demasiados puntos por responder y por solucionar. Existen demasiados problemas en Loreto y, sin embargo, parece como si no existieran o los candidatos no tuvieran la más mínima puñetera idea de cómo solucionarlos. La mayoría de esos problemas que afectan por igual a todos los sectores sociales. Voy a enumerar sólo algunos, sobre los cuales los partidos y movimientos no han dicho casi nada o sólo se han procurado decirnos algunas cositas sin sentido, como quien no quiere la cosa, como queriendo pasar piola por su desconocimiento o inviabilidad.

¿Algunos de ustedes, señores y señoras candidatos(as), tiene alguna propuesta real, sustentable, financiada, estable y lista para ejecutar sobre áreas verdes destinadas al público en general; prohibición de talado indiscriminado de árboles de todas las ciudades; destrucción de espacios históricos y arquitectónicos urbanos y rurales, la contaminación ambiental, el excesivo ruido (que nos ha conferido la categoría de una de las ciudades más ruidosas de Latinoamérica); la lucha permanente contra el caos vehicular (que ha llenado nuestras pistas con más de 70 mil motocicletas y 30 mil motocarros) ?

¿Alguien está hablando de cómo frenar los accidentes de tránsito, cómo solucionar el grave déficit de protección de la seguridad  (que ha tenido fuertes resonancias en la mayor cantidad de espacios posibles y ha convertido a nuestras ciudades en peligrosos espacios), plantea ideas claras sobre uso de casco y el reforzamiento de mecanismos de vigilancia, planes a largo plazo para mejorar la fluidez del tránsito sin apelar a ese aburrido, reiterativo y demagógico asunto de los “cientos de kilómetros de pistas”, que es la forma como se muestra la pobreza de ideas de modo elocuente?  

¿Alguien que está corriendo para el gobierno regional tiene un plan de salud integral que también luche contra los problemas endémicos como la malaria, el dengue y la desnutrición? ¿Alguien tiene mejores ideas para integrarnos al país que un tren que no tiene aún siquiera estudios de pre-factibilidad? Nadie nos ha dicho algo concreto y verdadero para recuperar las fronteras del narcotráfico, más allá de que todo debe trabajarse. Tampoco cómo generar infraestructura educativa sólida.  Los programas sociales para aminorar las cifras de pobreza en Loreto no funcionan adecuadamente (e incluso hemos visto que se los ha abandonado a su suerter). Tampoco sabemos si alguno de los candidatos esté dispuesto a jugársela por el turismo como eje fundamental del desarrollo.

Continúo ¿Algún movimiento ha incluido en su propuesta un programa de apoyo y coordinación para potenciar nuestra cultura? ¿Alguno nos ha comentado cómo haremos para llegar a tener banda ancha de internet? ¿Quién de todos se ha comprometido con idelalismo – pero con datos concretos – en el tema de conservación del ecosistema y la lucha contra la contaminación o la recuperación de los derechos indígenas? ¿El sector infraestructura? ¿El alcantarillado? ¿La lucha contra el contrabando de combustible? Así, como esto, muchos temas más.

¿Alguien ha señalado cuál será la solución a todo esto?

Existen requerimientos locales y regionales que requieren un desarrollo sostenible en el tiempo, no sólo en el ámbito educativo, sanitario, ecológico y de transporte, sino también en cuanto a valores educativos, culturales y espirituales. Evidentemente, para el cambio real, se requiere de un liderazgo político que imponga autoridad y genere ejemplo, con propósitos a largo plazo.

Creer que una calidad de vida alta, sustentable y adecuada para los loretanos no pasa necesariamente por invertir en obras elefantiásicas y a veces inútiles, sino en promover el recurso humano, la educación, el desarrollo de la tecnología y garantizar los pilares materiales y espirituales del entorno.

El gran limitante es que la población no ha hecho nada real para movilizar esto, ni para exigir, ni para demandar a los candidatos. Parece como si no importara, como si todo estuviera bien, como si sólo nos quejamos por pura pose, porque al momento de poner los puntos sobre las íes, todo parece ir de maravillas. En tanto, nos quejamos de la ineptitud, de la indiferencia o de la corrupción, pero nada más. La apatía parece habernos cercado. Y en tanto, a juzgar por los sondeos y las tendencias, caeremos aún más en el fondo de nuestros propios errores al elegir autoridades.

¿Acaso el problema son sólo los candidatos? ¿No es que en verdad somos todos los electores, también?

3 COMENTARIOS

  1. Hola!
    el problema es estructural, es cultural.Nuestro querido país precisa urgentemente de varias reformas, reformas profundas, comenzando por la reforma politica-electoral, principalmente,muy viciada y arcaica.En esta área se ven cosas q no se pueden aceptar como válidas.Por ejemplo, la desigualdad q existe en el derecho a la propaganda electoral, es muy injusta, no es democrtatica, hace mas propaganda quien tiene mas recursos, así como el periodo legal de propaganda de parte de los partidos q es muy prolongado, lo q propicia un mayor gasto de dinero en propaganda electoral y por consiguiente ello origina la corrupcion q deriva de la busqueda de financiamiento de las campañas politicas.Y así por delante una serie de anormalidades, como el hecho grave de aceptar registro de candidaturas sin entrega del respectivo plan de gobierno o detrabajo.Entonces como existe una gama de vacios en la ley electoral, eso propicia muchas irregularidades y un proceso q deberia ser totalmente serio y bien organizado, deriva en ese safarrancho q es actualmente la campaña electoral peruana y el voto termina reflejando lo q en verdad es la calidad del elector peruano: mal preparado, mal informado e injustamente engañado.Sin una ley moderna de partidos políticos, etc.Resultado, un país contradictoriamente frenado por sus propios hijos, q hablan mucho entre ellos y al final no sale nada productivo como resultado, todo queda en meros deseos.

  2. y ¿alguien está hablando de crear un verdadero plan estrategico de desarrollo local, aun si no hubiera uno nacional?
    Falta de vision es lo que caracteriza a los politicos de ahora por la sencilla razon de que no tienen voluntad para cambiar las cosas sino que prima un interes personal que obnubila un plan de largo plazo y que garantice la continuidad del plan. Por lo menos se debe sentar las bases para crear este plan, priorizando la educacion, los temas de salud y nutricion. Ese debe ser el compromiso de los aspirantes a gobernadores si es que queremos sacar del atolladero en que se encuentra nuestro pueblo amazonico. Claro que para eso se necesita sacrificio, trabajo, dejar de lado los intereses personales, compromiso, perseverancia y principalmente, tomar la decision de hacerlo. ¿se podrá hacer eso? o es mucho pedir.

  3. Totalmente de acuerdo con los comentarios vertidos por el redacotr NN, todos los candidatos se presnetan a darles fiestas, tragos, regalos, y la poblacion no se da cuenta o lo peor no le interesa que eso es dinero de ellos a la larga, seran pagados con los impuestos y tributos, cual es el beneficio de las fiestas, cual es la finalidad, facil, emborrachar a la poblacion y que esta no mejore, han visto el nivel educativo en Universidades, Institutos o Academias es pauperrimo y los que son exigentes no los consideran por que exigen demasiado, señores son la region con mas potencial del mundo pero no saben aprovecharla y dejan que gente mediocre de 2 pelos se beneficie de ello, organicen las bases civiles, y si no saben, pues busquen asesoria con alguien externo pero haganlo ya, no dejen que la Region Amazonia sea el retrete del Perú…

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