ESCRIBE: José Rodríguez Siguas


En principio fueron los murales de Carlos Reyes y Ana Varela. Dos nombres imprescindibles de nuestra literatura, si quieren comprobar lean los trabajos críticos de Jeremy Larochelle, Ricardo González Vigil, Roberto Forns-Broggi, Ana Molina, entre otros.

En los últimos días Iquitos viene siendo invadido por murales de personajes identificados con la Amazonía, enfocados desde distintos campos de la cultura, para que la población conozca algo de aquellos hombres y mujeres que dejan muy en alto el nombre de la Amazonía.

En principio fueron los murales de Carlos Reyes y Ana Varela. Dos nombres imprescindibles de nuestra literatura, si quieren comprobar lean los trabajos críticos de Jeremy Larochelle, Ricardo González Vigil, Roberto Forns-Broggi, Ana Molina, entre otros.

La segunda serie es de Gino Ceccarelli (sin duda: el mejor pintor, que no ha necesitado autoelogiarse, ni ser el mermelero de alguna autoridad para conseguir todo lo que ha logrado hasta ahora). Gino tiene un gran dominio de la luz.

Después tenemos a Rember Yahuarcani, heredero de la tradición de Víctor Churay, que ha sabido conjugar sus conocimientos ancestrales con la plástica occidental, creció en un ambiente muy ligado al arte, su papá Santiago también es un reconocido pintor (y no nos olvidemos el aporte de los Rubio en este campo). Ahora, tenemos también a Dorian Fernández quien insufla nuestro cine, dándole un nuevo renacer después de Antonio Wong, ya que nuestro cine siempre estuvo marcado por cineastas de otros lares como Herzog, Robles, Nora de Izcue. La opción cinematográfica de Dorian podrá ser criticada, pero es muy sincero con su propuesta, a mi me jode mucho cuando escucho sus comentarios sobre cine, pero hay que saber respetarlo, y lo que él ha logrado en tan poco tiempo, no lo podrán hacer otros en muchas vidas, que solo opinan de mala leche.

De Paco lo único que puedo decir es que le debemos muchísimo, y muchísima gente le debe algo a Paco, gran tipo, excelente persona, lástima que ya no podremos compartir las riquísimas brochetas en El Sitio.

Arrivederci.