Preocupados o intrigados en la composición del nuevo gabinete ministerial los loretanos no hemos reparado en el detalle que se ha dado una nueva correlación de fuerzas en el Parlamento en cuanto a la injerencia que tendrá en los organismos descentralizados la nueva integrante de la bancada de PPK, Patricia Donayre Pasquel y la que tendrá Jorge Meléndez, quien en los últimos meses ha estado distante de las decisiones presidenciales pero que ha mantenido su poder con los funcionarios públicos a los que ayudó a llegar a los puestos que ostentan. Más allá de la pertinencia –algo que en personas impregnadas de transfuguismo es tan relativo como el cambio climático- de pasarse al pepekausismo es muy probable que Patricia Donayre comenzará a portarse como integrante del Poder Ejecutivo y limitar su acción legislativa a funciones convencionales. Y en ese comportamiento tendrá que recomendar el nombramiento de funcionarios en perjuicio de Jorge Meléndez, quien tenía casi en exclusiva esa potestad.

Fuentes cercanas a Jorge Meléndez han confiado a este columnista que una vez enterado del enroque de Patricia Donayre, el fundador del MIL ha mostrado su preocupación. La misma se explica porque el alejamiento de Meléndez del entorno presidencial se dio por conflictos internos que tenían como único origen la cuota de poder que deberían poseer los congresistas oficialistas provincianos y enfrentados con los integrantes del Poder Ejecutivo. La integración de Donayre a la bancada se da en un momento que el representante que llegó al Parlamento en las filas de PPK ya no tenía mucho espacio en las esferas del poder. Los nombramientos, por ejemplo, en organismos que dependen directamente del Poder Ejecutivo como los proyectos especiales de Yurimaguas e Iquitos que están adscritos al Ministerio de Agricultura puede que sufran cambios. Más aún si consideramos que se ha cambiado al titular de ese sector.

En los próximos días se podrá conocer qué nivel de importancia tendrá Patricia Donayre en los organismos descentralizados. Ya que en el Poder Legislativo será muy poco lo que pueda lograr debido a que las Comisiones están totalmente conformadas y habrá que esperar hasta la próxima composición de la Mesa Directiva para tratar de expandir su radio de acción. Y el cambio de bancada no creemos que haya sido por cuestiones románticas de la política nacional sino por distribución de la cuota de poder que siempre tiene para ofrecer el Ejecutivo. Si miramos el nombramiento de Carlos Bruce en el Ministerio de Vivienda y Construcción –no olvidemos que fue uno de los que mostró su disconformidad con Donayre por su adhesión a PPK- y la composición del nuevo gabinete nos explicaremos lo reducido que puede resultar la acción de ella como nueva integrante del oficialismo.

Con la crisis ministerial y el transfuguismo ratificado en Loreto se presenta un nuevo escenario en la administración pública. Uno está ninguneado y solo goza del pequeño poder que sembró cuando recién juramentó. Otra estará atenta a la petición de nuevos funcionarios para colocar a gente de su entorno. Ojalá que entre uno y otro no prime los egoísmos naturales y sea Loreto la que finalmente se vea favorecido.