La justicia social

Moisés Panduro Coral

En un encuentro de jóvenes apristas realizado en la ciudad de Iquitos el último fin de semana discutimos, entre otros temas ideológicos y políticos, el concepto de justicia social. Pudimos desarrollar una aproximación a este concepto a partir de un ejercicio de contrastación de la realidad con nuestras ideas, ejercicio que nace de una máxima de Haya dela Torreque dice: “hay que llevar la realidad a los libros y no los libros a la realidad”. Estábamos allí, para aproximarnos a lo que debe ser la estructura y función de la justicia social en la construcción de un mundo de hombres libres, iguales y fraternos.

El primer eslogan que Haya dela Torreesbozó en los días germinales del aprismo decía: por la emancipación de América Latina, contra el imperialismo yanqui y por la justicia social. De hecho, el programa máximo del APRA continental de 1924 contiene puntos que dan estructura y función a la proclamación auroral resaltando entre ellos la solidaridad con todos los pueblos explotados y razas oprimidas del mundo. En el Perú, el discurso programa de 1931 traza un conjunto de políticas públicas dirigidas con nitidez a lograr la justicia social y delinea la descentralización política, económica y administrativa del país, como antecedente de lo que se conoció como “la justicia para los pueblos frente a la dominación del centralismo” y que en el lenguaje aprista moderno hemos propuesto denominar “descentralización redistributiva”.

Aplicador incansable de la dialéctica, en la revista Claridad de Argentina en 1932, Haya dela Torreescribió: “La justicia social no es un término oratorio, sino que supone una profunda verdad económica que el mundo necesita alcanzar para no perecer”. Si bien es cierto, la justicia social constituye el valor político fundamental del aprismo, de ninguna manera se puede soslayar que su realización pasa por el campo de la economía, de la forma como se acumula la riqueza y, aún más, cómo se redistribuye la riqueza para saldar inequidades territoriales, compensar desigualdades sociales y cerrar progresivamente la brecha que separa a los que mucho tienen de los que nada tienen.

No es pues una justicia social a lo Robin Hood, el personaje de los bosques de Inglaterra que según la leyenda robaba o quitaba sus bienes a los ricos para dárselos a los pobres. Esa forma de justicia social tan cacareada por los otrora “revolucionarios” de cafetín, -ahora “revolucionarios” de teclado-, suena bonita, pero no es realista. “No se trata de quitar la riqueza a quien la tiene, sino crearla para el que no la tiene”, decía Haya dela Torremás recientemente. Para qué les quito su riqueza (la bien habida, por supuesto, la mal habida hay que quitarlos toda) a los ricos si después hacemos cargar impuestos sobre los hombros de los pobres. En un Estado dela Justicia Social-otro concepto aprista nuevo- que es nuestra misión construir, los ricos tienen que pagar impuestos en relación directamente proporcional a su riqueza, pero sería un absurdo asfixiarlos o desparecerlos.

De cara al 2021, la verdad económica de la justicia social es ésta: crece la tasa de inversión promedio anual al 25%, se duplica el producto bruto interno (PBI), se cuadruplica el volumen de exportaciones, se mantiene la tasa de crecimiento anual en 6% y se mejora la tributación promedio anual en 5 puntos respecto del PBI, pagando los ricos los impuestos que corresponden. Ello no significa que no se eliminen abusos, que no se sancionen excesos, que no se combata la explotación del hombre por el hombre. Un Estado dela Justicia Socialcomo el que queremos será capaz de corregir o anular estas injusticias.

Ahora bien, el valor político de la justicia social debe transformar esa verdad económica en una reducción de la pobreza a menos del 10%, un ingreso per cápita entre US $ 8,000 y US $ 10,000; un coeficiente de Gini de 0.35, recibiendo los pobres los impuestos que pagan los ricos en la forma de oportunidades, infraestructura económica y de servicios, educación eficaz y expansiva, salud para todos, salarios justos, previsión y asistencia social; una población de 33 millones de peruanos sin pobreza extrema, sin desnutrición, sin  analfabetismo, ni mortalidad infantil; en suma, una sociedad más justa, equitativa y libre.

Algunos a esta secuencia de encuentros entre economía y sociedad le llaman “neoliberalismo” sin saber qué realmente encierra el concepto de neoliberalismo que como vemos es opuesto y distante al aprismo y a su concepto de justicia social. En 2007, las Naciones Unidas al proclamar la declaratoria del 20 de Febrero como Día Mundial dela Justicia Social, sostenía que “la justicia social es un principio fundamental para la convivencia pacífica y próspera” y que constituye “el núcleo de nuestra misión global para promover el desarrollo y la dignidad humana”. Si se fijan bien, lo que en realidad están diciendo las Naciones Unidas es que la justicia social encierra un valor político y una profunda verdad económica que el mundo necesita alcanzar para no perecer, repitiendo, con otras palabras, lo que Haya dela Torredijo en 1932.

6 COMENTARIOS

  1. Estos es un Lio de Cutileidos Plus Ultras y Eruditos de los Modelos Economicos de las ultimas dos decadas!!!!…cifras claras en la Sunat, BCRP, Adex, WB.org, y agencia para el desarrollo del Gobierno Amiericano.
    Y el resto es artimetica de Baldor!!!!
    Un Saludos Ing Moises,

  2. Mi estimado amigo Panduro, antes que nada no sé si usted es economista, pero le diré que mi profesión me permite y me faculta a opinar y estar preparado para un debate sobre estos temas. Usted no puede jactarse del crecimiento económico, y mucho menos querer hacernos creer que esto se debió a la gestión de su líder. Usted no dice ni siquiera se asoma a que él recibió un país en crecimiento y que este fue estimulado durante su gobierno por el aumento significativo de los términos del intercambio. No es mezquindad si digo que no hay nada nuevo y bueno en materia de estabilidad macroeconómica que se deba su gestión. Heredó una cuenta fiscal saneada y una bajísima inflación, con un nuevo esquema de política monetaria y un mercado organizado de deuda pública interna en soles que se adoptaron en los años 2002-2003. Pero, como aventajado seguidor del fujimorismo económico y político, enajenó, al igual que su antecesor, la soberanía del Estado sobre nuestros recursos naturales, y profundizó el modelo neoliberal primario exportador, desindustrilizador y terciarizador de la economía. ¿no se da cuenta del enorme daño que hizo al Perú su líder?
    El gobierno de Alan García nos dejó una economía más vulnerable y dependiente de factores externos, menos industrial y más productor de servicios de bajísima productividad, y con una distribución del ingreso más desigual y, por lo tanto, más expuesta al conflicto social. Me dí un tiempito para sintetizar la herencia que nos dejó, estas son algunas de las razones:
    1. Aumentó la penetración de las importaciones, afectando a la producción industrial y agrícola. Sus causas son los tratados comerciales y las rebajas arancelarias (como la reciente que reduce el promedio arancelario a solo 3.5%). Toledo dejó un porcentaje promedio de importaciones respecto al PBI (ambos en términos reales) de 17.5% y García nos deja un promedio de 20.8%. En materia de exportaciones, la gestión de García es solo beneficiaria de los precios altos de las materias primas. El porcentaje promedio de exportaciones con respecto al PBI fue de 19.4% en el gobierno de Toledo y de 19.8% en el gobierno de García. La enorme vulnerabilidad a la caída de los términos del intercambio es obvia. ¿Cuál es el mérito de Garcia en este tema? Ninguno.
    2. La industria no primaria mantiene su baja participación de cerca de 12% en la generación del PBI. El crecimiento es liderado ahora por el Comercio y Otros servicios –además de la Construcción– que en conjunto representan el 63.0% del PBI. Estos dos sectores y la Construcción son los que más crecieron durante el período 2005-2009: 37.8%, 30.9% y 65.4%, respectivamente, mientras el PBI creció a la tasa de 20.9%.
    3. El crecimiento no se sustenta en aumentos sostenidos de la productividad y, por lo tanto, no conduce a ganancias de competitividad. En los sectores de Comercio y Otros servicios trabaja el 77% de la PEA en empresas de 1 y 10 trabajadores de baja calificación y donde el ingreso promedio mensual se ubica entre 600 y 750 soles.
    4. Esta manera de crecer acrecienta la desigualdad de ingresos y, por ende, alimenta el conflicto social. Mientras el PBI y las exportaciones reales per cápita crecieron en el período 2000-2008 en 47.2% y 69.1%, respectivamente, los salarios reales promedio decrecieron 10.0%.
    5. El modelo neoliberal es exportador neto de capitales. Entre enero de 2006 y setiembre de 2010, los capitales extranjeros expatriaron utilidades por casi 37 mil millones de dólares y solo ingresaron como inversión extranjera directa cerca de 27 mil millones de dólares. La reciente integración de los mercados de capitales de Perú, Chile y Colombia, reduciendo el impuesto de sus ganancias a 5%, amplían las posibilidades de salidas de capitales.
    Primero nos dejó la hiperinflación ahora nos deja una economía más vulnerable y más dependiente de los mercados externos. “En lo que el hombre ejecuta –dice Stuart Mill– se funda su derecho a la consideración pública”. Y si hablamos de temas sociales y políticos tampoco sale bien parado. Una muestra: “el perro del hortelano” = Baguazo.

    • No soy economista, mi estimado Ben, pero si tu lo eres dejas muchas dudas. Afirmas primero que Alan sólo siguió lo que Toledo le dejó, es decir, si algo bueno hizo fue porque siguió lo que Toledo le dejó. Sin embargo, unas líneas más abajo dices que «enajenó, al igual que su antecesor, la soberanía del Estado sobre nuestros recursos naturales, y profundizó el modelo neoliberal primario exportador, desindustrializador y terciarizador de la economía». No te entiendo.

      La economía peruana quedó más fuerte que nunca, lo reconocen todos, aquí y en el mundo. Debes candidatear al premio Nobel de Economía si demuestras lo contrario. Te voy a dar unos datitos más a ver si corriges tu tremenda desinformación:

      1. Nuestras reservas internacionales se situaron durante el gobierno de Alan por encima del 20% del PBI, que vienen a ser casi 60 mil millones de dólares, es decir, una economía fuerte y sólida preparada para cualquier contingencia.

      2. No sé de donde has sacado el dato sobre exportaciones. Te recomiendo que no te confíes de cualquier fuente en internet. EL BCRP en sus Notas de Estudios de Febrero de 2012 dice que durante el año 2010 el superávit de nuestra balanza comercial fue de 6,750 millones de dólares (X= 35,565 y M= 28,815) mientras que en 2011 fue de 9,302 millones de dólares (X=46,268 y M=36,967). Si bien es cierto, los productos no tradicionales siguen siendo nuestro fuerte, de ninguna manera se puede soslayar que en estos últimos años se han incrementando sostenidamente nuestras exportaciones de productos no tradicionales; en las importaciones te darás cuenta que más que bienes de consumo, es decir bienes finales, hemos importado insumos que es para procesar bienes finales. Lee el cuadrito que te presenta el BCR, analízalo y si no puedes interpretarlo busca ayuda para que no sigas diciendo cosas que no corresponden a tu formación de economista.

      3. Como el tiempo es oro, y a propósito de la redistribución de la riqueza, de los ingresos, te dejo una tareíta, mi estimado Ben. Respóndeme ¿cómo es que en el Perú de Alan el Coeficiente de Gini que mide la desigualdad social en el mundo se ha reducido a 0.44 (Toledo lo dejó en 0.49) y que estemos mejor posicionados que México, Argentina, Brasil, Chile, superados solo por Uruguay (Fuente: GRADE- Banco Mundial)?.

      Un abrazo.

  3. Mi estimado Ben, respecto del IDH parece que recién estás descubriendo que el juane es amazónico. Escribí, en este mismo diario, hace varios años, artículos sobre el Índice de Desarrollo Humano, qué es, cómo se calcula, qué variables nuevas se incorporan año tras año, etc. y la verdad -que te debe producir un escozor terrible- es que en el gobierno de Alan García el Perú ha subido varias posiciones en el IDH Internacional. En el 2010 el Perú subió 15 puntos más respecto de la anterior medición en 2009, como consecuencia de políticas públicas que combinan crecimiento económico y redistribución de la riqueza. Esta última medición nos ha posicionado en el puesto 63 entre 169 países medidos con este índice (antes el 2009 ocupábamos el puesto 78 y antes de Alan estábamos en la lona). Nos hemos situado por encima de Brasil, Venezuela, Colombia, Ecuador, a décimas de Costa Rica. Nos superan todavía Chile, Argentina, pero es innegable el gran ascenso que tuvo Perú en el tan denostado segundo gobierno aprista. No vayas a mencionar el coeficiente de Gini que mide la desigualdad, porque sobre eso también ya escribí y ahí también el Perú (nuevamente con Alan García para tristeza de algunos) mejoró notablemente su indicador. Esto no lo medía Renán Quispe del INEI, mi amigo.

    En cuanto al PBI percápita, deberías revisar tus fuentes porque estás en la luna. Te alcanzo los datos del PBI percápita en el Perú del 2007 al 2011. 2007: US $ 3,807; 2008: US $ 4,456 ; 2009: US $ 4,412 (algo nos impactó de la crisis iternacional); 2010: US $ 5,292; 2011: US $ 6,009. Por eso nuestra meta realista es un PBI percápita de US $ 10,000 en el 2021.

    Que te hayas equivocado o ignores las cifras anteriores se te puede perdonar, pero ya lo de las exportaciones sí me parece una mala leche imperdonable, mi estimado. Efectivamente, nuestras exportaciones en los últimos seis meses se redujeron, pero no te olvides que no es Alan García ni los apristas los que ahora conducen al país (ya salimos hace un año y dos meses), sino el presidente por el que seguramente tu votaste. Se llama Ollanta Humala, por si no lo sabes. Ahí está el problema, en estos momentos el Presidente y Nadine, no están asumiendo responsablemente una nave con rumbo fijo que les hemos dejado nosotros los apristas. ¿Qué hacemos? ¿les derribamos? No, pues, hay que esperar un poco a ver si se acuerdan que han siso elegidos (una de ellas, no) para gobernar, no para andar en campaña electoral con cino años de anticipación.

  4. Mi estimado Ben, respecto del IDH parece que estás descubriendo que el juane es amazónico. Escribí, en este mismo diario, hace varios años, artículos sobre el Índice de Desarrollo Humano, qué es, cómo se calcula, qué variables nuevas se incorporan año tras año, etc. y la verdad -que te debe producir un escozor terrible- es que en el gobierno de Alan García el Perú ha subido varias posiciones en el IDH Internacional. En el 2010 el Perú subió 15 puntos más respecto de la anterior medición en 2009, como cosnecuencia de políticas públicas que combinan crecimiento económico y redistribución. Esta última medición nos ha posicionado en el puesto 63 entre 169 países medidos con este índice (antes ocupábamos el puesto 78). Nos hemos situado por encima de Brasil, Venezuela, Colombia, Ecuador, a décimas de Costa Rica. Nos superan todavía Chile, Argentina, pero es innegable el gran ascenso que tuvo Perú en el tan denostado segundo gobierno aprista. No vayas a mencionar el coeficiente de Gini

    En cuanto

  5. Tengo un shunto de argumentos para tumbarme este bla bla bla. Pero solo es necesario creo 2 cositas: ¿justicia social con cifras inventadas?
    1. El mes pasado las exportaciones han caido en 25% con respecto al mismo periodo del 2011. Sexto mes consecutivo.
    2. Hace tiempo que el PBI per capita peruano es mas de $9000 dolares al año. Cosa que no indica nada para los peruanos de a pie.
    El mejor indicador del desarrollo de los paises no es el PBI, es el IDH.
    Para finalizar, hacerle recordar que hace tiempo que Renan Quispe ya no trabaja en el INEI, estas cifras -las mismas que manejaba tu jefe- ya estan desfasadas.

Los comentarios están cerrados.