Congestionamiento fluvial

Llegar a Caballococha se ha vuelto todo un martirio para los pasajeros que usan la vía fluvial. Por estos días el río Amazonas ha bajado a tal punto que llegar hasta el lago que finalmente lleva a la ciudad fronteriza es para personas que no tienen problemas cardiacos. Los peque peque (canoas ligeras con motor) se chocan entre ellos tratando de llegar primero a la parte ancha del río para de ahí tomar el lago y llegar al destino final. Más de un artista de la capital y varios periodistas pegaron gritos cuando las embarcaciones chocaban entre sí y con la orilla.

Gasolina en las calles

Lo que llama la atención en Caballococha, que cumple 31 años de creación política, es que no cuente con un grifo para el expendio de gasolina. En muchas esquinas de las calles de Caballococha se puede ver a personas que con botellas de gaseosa en mano, pero llenas de gasolina, atienden a los motocarros y motociclistas. Informalidad total.

Negocio nada despreciable

Una de las vendedoras confesó a este diario que diariamente venden 12 galones promedio que le deja una ganancia neta de 80 soles vendiendo desde las 6 de la mañana hasta las 8 de la noche. Cada botella de un litro de gasolina cuesta 3 nuevos soles.

Concita atención de Colombia

El Festival Internacional de la Canción del Caballito Blanco genera tal atención que un gran número de colombianos participan del mismo. La primera noche una adolescente sorprendió en el escenario por sus dotes para el canto y su capacidad para manejarse en el escenario. Los colombianos esperan quedarse con algunos de los premios.

Votación cautiva

El alcalde de la Provincia de Ramón Castilla, Gregorio Quispe, ha dicho a este diario que la votación de su congregación, que se abstuvo de participar en el último proceso electoral, es cautiva. Expresó que los más de 8 mil votos en blanco y nulos que se obtuvo es una muestra que si hubieran optado por postular eran reelegidos. Para Quispe ese número de votos corresponde a los que votarían por algún candidato de la congregación.

Adoquines en pistas

Nadie sabe de dónde ha sacado la idea el alcalde de Caballococha que en vez de pavimentar las vías en forma normal opta por colocar adoquines, tipo ladrillo. Si bien le da una imagen diferente a estas calles no se sabe si las mismas tienen la suficiente capacidad para durar un tiempo prolongado. Ideas innovadoras, dirán algunos.

Reencuentro de añejos

Quienes se reencontraron luego de tiempo en Caballococha son los periodistas Armando Ayarza Uyaco, Eulogio García y Augusto Falconi, que es una suerte de fotógrafo oficial del festival. Falconi demostró sus dotes de bailarín en un local llamado “Bambu”, una especie de mini Complejo del Pardo. Falconi tiró la toalla de tanto bailar pues la cama le llamaba.

Dúo dinámico

No es el dúo musical. Nos referimos a Franco Meléndez y Liceth Rodríguez. Cada uno en lo suyo demostrando su calidad profesional para animar este tipo de actividades. Cada uno se corregía ante algún lapsus. Ambos estuvieron sobrios en la primera noche. Habrá que ver cómo les va en lo que queda de la segunda noche y la final que es hoy lunes por la noche.

Tras bambalinas   

Luis Weiselberger uno de los responsables de la organización

Luis Weisselberger Vílchez es uno de los artífices para que el Festival Internacional del Caballito Blanco sea un éxito. La experiencia de Lucho para producir este tipo de espectáculos salta a la luz. Como detalle mayor se debe destacar la orquesta integrada por músicos profesionales dirigidos por el incomparable Claudio Fabri. A ellos se suma Yoshi, quien también es uno de los directores de orquesta de este Festival. Ya es hora que en Iquitos se retome algún Festival. El FICA es el más grande recuerdo de lo que fue un festival de envergadura en su momento y del que sólo queda recuerdos.