[Cuando estudiaba en la UNAP hacía lo mismo].

Como el gobernador notó que la visita presidencial sirvió para que la gente se diera cuenta de su mediocridad y doble discurso en las últimas horas apeló al fácil recurso de los pasquines y panfletos, pues los “periodistas trolleros” y operadores mediáticos no le están funcionando como él quisiera.

Cuando estuvo en la colocación de la primera piedra del mercado de Belén se dio cuenta que el alcalde Richard Vásquez era el protagonista Fernando Meléndez sólo atinaba a sonreír nerviosamente. A la visita al CITE-Maynas, donde la alcaldesa Adela Jiménez era la anfitriona, simplemente no apareció porque su diferencia con la autoridad provincial es tal que no piensa en el beneficio de la población sino en sus apetitos políticos electorales.

En su propósito insulta a todas las autoridades sin importar el origen y la capacidad de las mismas y sólo está preocupado en mantener privilegios presupuestales y mediáticos que se volverán insostenibles.

La estrategia de revoltoso y de sembrar la desunión entre las autoridades locales que intenta implementar como política de gobierno el líder del MIL, Fernando Meléndez Celis, le jugó una mala pasada con el descenlace del último fin de semana que culminó el sábado con la visita del Presidente de la República, Ollanta Humala. Según fuentes del Gorel el compartir estrado con los ministros de Vivienda, Producción y Desarrollo Social y los congresistas Norman Lewis del Alcazar, Manuel Merino, Víctor Isla Rojas y Leonardo Inga y varios alcaldes distritales no le cayó nada bien al gobernador. Peor aún estar presente en la entrega de un cheque al alcalde de Punchana, Euler Hernández, y a la alcaldesa de Maynas, Adela Jiménez, le sonó a bofetada porque la institución que administra no recibe recursos simplemente porque no tiene proyectos en los sectores y se ha limitado a administrar los fondos que le destina el gobierno central por situaciones de emergencia, especialmente en el sector Salud, donde ya se ha demostrado que los funcionarios que allí ha colocado están sobrevalorando las compras de equipos, como se informó en la edición de ayer de este diario.

Como el gobernador notó que la visita presidencial sirvió para que la gente se diera cuenta de su mediocridad y doble discurso en las últimas horas apeló al fácil recurso de los pasquines y panfletos, pues los “periodistas trolleros” y operadores mediáticos no le están funcionando como él quisiera. Es así que, según algunas versiones, habría ordenado que el lunes en la mañana -tal como lo hizo el día de las elecciones- sus operadores distribuyeran volantes donde se insulta y difama al propio Presidente de la República y varios congresistas que no siguen sus pretensiones.

Cuando el Presidente de la República dijo el sábado en Varillalito que «El desarrollo loretano tiene que estar amarrado a la inteligencia de la gente y a la capacidad productiva de nuestros hijos», el gobernador cambió de semblante. Cuando los ministros de Estado le obviaron en sus discursos y en la relación de obras proyectadas no tuvo más remedio que mirar a los costados. Cuando estuvo en la colocación de la primera piedra del mercado de Belén se dio cuenta que el alcalde Richard Vásquez era el protagonista Fernando Meléndez sólo atinaba a sonreír nerviosamente. A la visita al CITE-Maynas, donde la alcaldesa Adela Jimenez era la anfitriona, simplemente no apareció porque su diferencia con la autoridad provincial es tal que no piensa en el beneficio de la población sino en sus apetitos políticos electorales.

Y es que según algunos analistas políticos que le conocen desde la época en que era dirigente universitario en la UNAP siempre Fernando Meléndez ha tenido no solo doble discurso y actitud dual sino que provocaba la violencia con tomas de locales para luego recibir trato preferencial del Decano o del Rector. Y cree que eso le funcionará en el Gorel, más aún si destina recursos económicos para viajes y viáticos de personas que cree manejar como marionetas. Sabe que no tiene argumentos para lanzar críticas al Gobierno Central pero lo hace en el intento de aparecer como víctima. Por eso, cuando el presidente Ollanta Humala destacó que “en estos cinco años de gobierno ha habido una transformación para bien en la Amazonía, ya que se destinaron inversiones por más de 3500 millones de soles, monto superior a los 1900 millones de soles comprometidos en el Consejo de Ministros Descentralizado”.

Y si se hace un recuento de obras que ejecuta el Gorel se notará que todas provienen de la administración anterior. Hospital Santa Gema, Hospital Apoyo Iquitos, Embarcadero el Huequito -en donde ha obligado a cambiar el expediente técnico con el único propósito de poner el color de la agrupación que fundó, el MIL, y que quita estética al lugar con el naranja que luce actualmente”. Siguiendo su experiencia universitaria un día lanza insultos contra los representantes del gobierno central en el intento que le transfieran recursos. Pero el Poder Ejecutivo transfiere los mismos previa presentación de proyectos y posterior aprobación. Así se hace en Belén, Trompeteros, Maynas, Punchana, Alto Amazonas y hasta en entidades descentralizadas que tienen autonomía administrativa. Así se hacen las pavimentaciones, el agua y desague, le reforestación de cacao, carreteras, electrificación y otras más. Por ejemplo, pide compensación y recibe como respuesta que solo el nuevo centro de abastos de Belén “se ejecuta con una inversión de 83 millones 174 mil 687 soles y tendrá más de 950 puestos comerciales y alojará a más de 5,000 comerciantes y productores. La obra contribuirá al desarrollo económico inclusivo de la provincia de Maynas y a la generación sostenible de ingresos de comerciantes y productores agropecuarios”. No quiere coordinar nada con la alcaldesa de Maynas e, inclusive, manda a sus operadores y “trolleros” a dinamitar proyectos como el CITE y recibe como respuesta del Poder Ejecutivos que “que el CITE Productivo Maynas se ejecuta con una inversión de 9 millones 993 mil 403 soles y tiene como objetivo proveer servicios de innovación tecnológica en las cadenas productivas de frutos tropicales y acuícola en la región Loreto. Además, busca cerrar brechas de demanda-oferta en servicios de promoción, extensionismo, transferencia e innovación tecnológica para la mejora de la competitividad”. Y en nada de ello interviene.

Por todas estas consideraciones quienes le conocen afirman que en los siguientes días continuará con una campaña clandestina de sembrar violencia e intentar dividir a los pobladores entre quienes están con él y quienes están contra él. Por eso no será difícil identificar a los operadores y medios que se prestarán a su propósito. Porque de una cosa hay que estar convencidos: la espiral de mediocridad, violencia, revanchismo y perturbación que ha instalado Fernando Meléndez en la administración regional no tiene antecedentes y su comportamiento es peligrosísimo para el desarrollo de Loreto.