Editorial – Julio 27

Alcalde de tres por cuatro 

El nombre de Emir Masegkai Jempe no dice casi nada a nadie. Salvo a su propia familia, a sus conocidos y otros de la localidad de San Lorenzo. Este varón ha puesto el sillón consistorial por los suelos, ha mancillado el honor edil y merece por lo menos una sanción. Resulta que para otorgar la buena pro de la importante obra de agua y alcantarillado violó casi todos los dispositivos oficiales. No se detuvo ante nada ni ante nadie y, metió las cuatro patas con vicios, ausencias y omisiones, en el proceso de licitación. Lo más grave de todo recién se conoce ahora.

El mentado burgomaestre parece que ignora el elemental arte de la lectura de números, de cifras. De otra forma no se explica que no se haya dado cuenta de que la obra en mención no tiene el presupuesto requerido. La plata que ha conseguido no es ni siquiera la mitad que requiere el agua y el alcantarillado de San Lorenzo. ¿Cómo entonces se puede hacer esa obra sin el dinero requerido, sin la plata completa? Lo peor de todo es que ya no puede conseguir dinero de ninguna parte. Es decir, la obra queda paralizada hasta nuevo aviso o se puede hacer hasta donde alcance la inversión.

Estamos entonces ante un alcalde de tres por cuatro, sin la elemental preparación para gobernar los destinos de un lugar desde los predios de la edilidad. El señor Emir  Masegkai debería dejar de hacer barbaridades en su gestión, dejar el cargo y aprender todo lo relacionado a una gestión edil, o renunciar para siempre. El caso no parece ilustrativo de la escasa capacidad de gestión que tienen tantos alcaldes de esta región del país. Nos parece aleccionador ahora que se acercan las elecciones. ¿Cuántos de los candidatos de ahora, que besan o no besan, están cerca del burgomaestre de la provincia del Datem?