Hace poco menos de un mes ingreso al Hospital Regional una joven de 23 años que se había realizado prácticas abortivas introduciéndose tallo de piri piri dentro del útero. Su estado era crítico, con presión arterial baja, taquicardia, fiebre, anuria (ausencia de orina), en fin con el diagnostico que en medicina se conoce como shock séptico, que es la forma más grave que puede llegar una infección, y que, pese a todos los esfuerzos que se hicieron, la llevó finalmente a la muerte.

Este hecho, que parece aislado pero que de ninguna manera lo es, nos plantea muchas interrogantes. La primera y acaso la más importante es: ¿Se podría haber evitado esta muerte? La respuesta inmediata es sí. Evidentemente para llegar al aborto provocado se tiene que partir del hecho que casi siempre se debe a un embarazo no deseado. Si la joven paciente hubiera empleado un método anticonceptivo lo más probable es que no hubiera embarazado y en estos momentos estaría viva. Otro hecho, que fue el punto de partida de la infección que la llevo a la tumba, fue la aplicación del tallo de piri piri en el útero. Esto forma parte del folklore local para inducir el aborto. A lo largo de los años que atendemos estos casos en el hospital nos hemos encontrado con métodos tan increíbles como la introducción de tallo de yuca,  infusión de semilla de palta o lejía dentro del útero que casi con seguridad va a llevar a una infección potencialmente mortal. Entonces llegamos a la conclusión que esto se produce por la ignorancia de lo que pueden causar esta sustancias en el organismo.

La base para cambiar de raíz todo esto es la educación. Debemos hablar con nuestros hijos de manera clara, directa, desde que ellos son pequeños y nos hacen preguntas que tienen respuestas que no son fáciles de dar, sobre todos los tópicos de la vida, y si no preguntan y tenemos la oportunidad de tocar el tema de como nacen los hijos, de las relaciones sexuales, del embarazo, del aborto y un largo etc. pues debemos tomar al toro por las astas y brindar la información adecuada para su edad porque sino ellos la obtendrán de las personas menos apropiadas como amigos de la misma edad y van a crecer con ideas deformadas respecto a estos temas , sino acordémonos cuando éramos adolescentes y con quienes coversábamos de todo esto. En el colegio se deben dar temarios sobre estos tópicos y otros que se rodean con el halo de misterio, o que se hablan solo en voz baja, para ser desarrollados entre padres e hijos en la casa y luego ser tratados en el colegio. El resultado final sería jóvenes con una mentalidad más amplia, con más base para afrontar problemas, para evitarlos cuando deban ser evitados, en fin, para cuidar su  salud para que en su momento sean padres sanos de hijos sanos.

Si bien la educación es la piedra angular para ser mejores, también es cierto que se deben proporcionar los instrumentos para evitar los embarazos no planificados, que no es lo mismo que los no deseados. Esto se logra a través de los hospitales, centros y puestos de salud que brindan información gratuita y entregan gratuitamente los métodos anticonceptivos a todas persona que lo solicite.

Esta reflexión sale a luz en parte al hecho estadístico de que se realizan cuando menos 3 a 4  legrados uterinos diarios por aborto incompleto en el Hospital Regional.